Se confirmó ante los ojos internacionales lo que ya todos los venezolanos sabían y sufren todos los días. El gobierno del dictador Nicolás Maduro Moros comete crímenes de lesa humanidad.
El voluminoso informe de la ONU sobre Venezuela, despeja las dudas de esos gobiernos que todavía confiaban en la palabra del dictador.
443 páginas, llenas de tecnicismos donde queda plasmada de una vez por todas la crueldad de las políticas avaladas por el sangriento socialismo.
Torturas, asesinatos, desapariciones, detenciones arbitrarias, siendo cometidos en el nombre de la patria. Estamos hablando de algo que se sabe desde que comenzó la catástrofe del país con la presidencia del difundo teniente, Hugo Chávez.
Mientras que el país se hundía poco a poco en la miseria gracias a las políticas fallidas del socialismo, las fuerzas represivas del estado tomaban cada vez más autoridad para abastecer su arsenal represivo, cometiendo los más atroces crímenes de lesa humanidad.
Con la sucesión del chofer de autobús a la presidencia, la represión alcanzó niveles que no se imaginarían.
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Crímenes de lesa humanidad forman parte del experimento chavista
Todas las torturas y atropellos que detalla el extenso informe de la ONU sobre Venezuela, los expertos de la organización las clasifican como «parte de un curso de conducta tanto generalizado como sistemático».
Y algo que podría considerarse aún más importante, el informe documenta que «Maduro y sus ministros del Interior y Defensa no solo estaban al tanto de los crímenes, sino que dieron órdenes, coordinaron operaciones y suministraron recursos».
Es así como la responsabilidad recae de manera aplastante en todo el gabinete político de la dictadura.
La ex fiscal de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, quien por muchos años pasaba por debajo de la mesa los crímenes que se cometían bajo la voz de mando de Maduro, colaboró con la mayoría de la información que fue publicada en el informe de la ONU.
Informe de la ONU sobre Venezuela habla de los colectivos armados de Maduro
El informe de la ONU sobre Venezuela hace énfasis en los llamados «comandos anti golpe» que están formados por militares y sociedad civil, bien suministrados con armas de fuego que se encargan de reprimir las manifestaciones de la oposición y causar terror a las personas.
Los expertos de la ONU, tienen en su poder documentos oficiales donde se evidencia el papel de los colectivos armados que usa la dictadura venezolana como forma de represión en los barrios, y que también fungen como informantes del gobierno.
Los colectivos armados, junto con la Policía Nacional Bolivariana (PNB), las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) y los Consejos Comunales, se encargan de “apuntar” a los opositores.
La información que suministran los Consejos Comunales sobre las personas opuestas al régimen, les sirve a organizaciones como el SEBIN para detener arbitrariamente y torturar a estas personas sin haber cometido ningún delito.
Venezuela tiene la tasa más alta de asesinatos cometidos por el Estado
Los crímenes de lesa humanidad y la carnicería perpetrada por el madurismo son algo alarmante. El informe indica que el país tiene una de las tasas más altas de América Latina de muertes auspiciadas por las manos del Estado.
La misión investigó 16 operaciones policiales y militares que conjuntas dieron un total de 53 ejecuciones extrajudiciales. Además, ocho de estas operaciones dieron lugar a 10 o más muertes.
La impunidad con la que gozan los entes represivos del estado les da la fortaleza para seguir asesinando y torturando.
El informe afirma que «los asesinatos parecen formar parte de una política de eliminación de miembros no deseados de la sociedad».
Después de esta lapidaria descripción del sistema criminal venezolano y la impunidad que reina en las calles, sumado a la catastrófica situación económica, ¿quién en su sano juicio podría defender a la dictadura de Nicolas Maduro?
La respuesta: Cuba, China, Rusia, Irán. Países que al igual que Venezuela, han rechazado rotundamente la visita de comisionados de la ONU en su territorio.
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El régimen sin vergüenza alguna
El único que ha respondido del gabinete torturador de Maduro ha sido el canciller Jorge Arreaza. Sin vergüenza alguna coloco en su cuenta oficial de Twitter:
“Un informe plagado de falsedades, elaborado a distancia, sin rigor metodológico alguno, por una misión fantasma dirigida contra Venezuela y controlada por gobiernos subordinados a Washington, ilustra la práctica perversa de hacer política con los DDHH y no política de DDHH.”
Es imposible que el régimen de Venezuela pueda hacer algo de ahora en adelante para lavar esta gran mancha de sangre. El informe servirá para abrir las investigaciones correspondientes ante las personas que han ordenado y cometido los impensables crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
