Texto: Raúl del Pino
Fotos: Enmanuel Santos
Con su impresionante triunfo en extrainnings frente a Guantánamo, los Toros de Camagüey han logrado finalizar la primera barrida de cinco juegos en el actual campeonato, igualando así su mejor racha histórica, alcanzada en la Serie 59, cuando el equipo, dirigido por Miguel Borroto en ese momento, encadenó ocho victorias consecutivas.
Impulsados por este fuerte impulso anímico, la novena ahora bajo la dirección de Marino Luis se trasladará al estadio Mártires de Barbados en Granma en busca de establecer un nuevo récord absoluto para la provincia. Sin embargo, se enfrentarán a la ofensiva más potente del torneo, liderada por un Alfredo Despaigne en estado de gracia, quien ya ha conectado siete jonrones en 12 encuentros.
“El caballo de los caballos”, como lo apodó un conocido narrador deportivo hace años, está demostrando estar por encima del nivel de una liga afectada, donde la calidad del pitcheo es notablemente inferior a la que enfrentó durante una década en Japón. A este ritmo, podría soñar con romper su propio récord de 36 jonrones establecido en el año 2012, a pesar de que esta fase de clasificación solo concluirá tras 75 juegos, a diferencia de los 90 que se jugaron en aquella recordada Serie 51.
Si continúa así, superará fácilmente la marca de 40 jonrones, una cifra que algunos considerarían impensable, pero si alguien puede lograrlo, es el corpulento toletero de 37 años, que suma un total de 467 jonrones en su carrera, combinando los 270 conseguidos en Cuba, los 13 en su paso por México y los 184 en la Liga Japonesa.
No obstante, los Alazanes de Granma no dependen únicamente de Despaigne, ya que junto a él se encuentra su compañero de equipo Alexquemer Sánchez, ambos liderando la tabla de máximo impulso con 17 carreras impulsadas. Además, los tricampeones nacionales cuentan en su plantilla con los talentosos primos Raico y Roel Santos, otro sólido bateador como Guillermo Avilés y el inicialista Guillermo García. Gracias a la colaboración de todos, el equipo dirigido por Ángel Ortega presenta un asombroso promedio de bateo de .350, el mejor del campeonato por un amplio margen.
A pesar de que Granma y Camagüey, ambos con ocho victorias y cuatro derrotas, tendrán el duelo más atractivo de la semana, ninguno de los dos está en la cima de la tabla de posiciones, un privilegio que por el momento pertenece a los Tigres Avileños, gracias a sus 10 triunfos y solo dos reveses.
Después de haber vencido en cuatro de cinco ocasiones a los Cocodrilos de Matanzas (5-7), los felinos del centro de la isla permanecerán en su hogar, el estadio José Ramón Cepero, para recibir a los Gallos de Sancti Spíritus (5-7) e intentar mantener su liderato, cuya principal amenaza proviene de Pinar del Río.
Los Vegueros (9-3) están viviendo un renacimiento de la mano de una leyenda como Alexei Ramírez, otro veterano de mil batallas que, tras vivir sus mejores años en Grandes Ligas, ha regresado a los 42 años para dar sus últimos cartuchos en Cuba y se ha convertido en la chispa de su equipo. Ahora, los pativerdes recibirán a las caídas Avispas de Santiago (4-8) en la reedición de uno de los grandes clásicos de la pelota cubana.
Otra subserie que enfrentará a equipos de la parte alta de la tabla será la que dispute Industriales (8-4) y Mayabeque (6-6). Los Leones de Guillermo Carmona vienen de ganar cuatro juegos en Cienfuegos (3-9), mientras que los Huracanes de Michel González cayeron 2-3 en el “derby habanero” ante Artemisa (6-6).
Regresando a las actuaciones individuales, el lanzador derecho José Ramón Rodríguez fue protagonista en Guantánamo de otra magnífica actuación en el montículo, donde lanzó nueve entradas sin permitir carreras, acumulando 10 ponches, una cifra que lo posiciona en la cima de este apartado estadístico con 21. Además, su compañero de equipo Alexander Ayala se encuentra liderando el ranking de bateadores con un promedio de .463.
Por su parte, el pinero Yadier Garay continúa en un excelente estado desde el montículo, no solo por mantener inmaculado su promedio de carreras limpias en 13.2 innings, sino también por haber logrado tres victorias y dos salvados en sus seis presentaciones.