Foto: Javier Guitiérrez | Facebook
Texto: Fede Gayardo
La policía cubana arrestó a un ciudadano, conocido como Demis, tras descubrir múltiples armas y municiones en su hogar, que se encuentra en el barrio Los Pinos, municipio Arroyo Naranjo, en La Habana.
A través del perfil de Facebook del periodista Javier Gutiérrez, se reveló que el operativo tuvo lugar esta semana, cuando “las fuerzas del área de Investigación Criminalística y Trabajo Comunitario, dirigidas por el Jefe de Sector, llegaron a Guáimaro s/n, Sagua y Alday”.
De acuerdo con la publicación de Gutiérrez, los agentes “al abrir la puerta, se dieron cuenta de que su tarea no era solo un trámite; estaban ante un arsenal”.
Dentro de la vivienda de Demis, las autoridades encontraron “una escopeta Perle moderna con mira óptica, una escopeta calibre 22 y más de 150 cartuchos de varios calibres”.
Asimismo, había un cinturón porta cartucho con 27 balas, otro con 18 vainas, y una considerable cantidad de estuches y pistones de escopeta. “Todo un arsenal oculto en el corazón del barrio”, señala el mencionado periodista.
Mientras los oficiales aseguraban el área, el individuo intentó justificar la existencia del armamento en su casa, pero la legislación cubana prohíbe la tenencia de armas sin la debida autorización. En situaciones como esta en la isla, las penas por posesión ilegal de armas pueden incluir varios años de prisión.
Demis se encuentra actualmente “bajo un proceso investigativo” y, según la fuente, “enfrenta serias acusaciones”.
Este caso, que no es tan aislado en los últimos tiempos en Cuba, genera una creciente preocupación entre los habitantes de la isla, quienes consideran que la crisis económica y social podría estar contribuyendo al incremento de la criminalidad.
Para citar solo un ejemplo, recientemente se hizo viral un video en redes sociales que capta el momento en que un grupo de jóvenes lleva a cabo un violento ataque en las cercanías de una vivienda en la isla.
La impactante grabación muestra a uno de los implicados golpeando con dos machetes el portón de la propiedad, mientras otros lanzan botellas hacia el patio. Casi al final del video, uno de los atacantes eleva la tensión en el lugar al desenfundar una pistola.
