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Texto: Hugo León
Una vez más, la música cubana resplandeció en los Latin Grammy gracias al talento y la calidad artística de figuras como Omara Portuondo, Chucho Valdés y Paquito D’Rivera. Sin embargo, no todos los nombres de los premiados llegaron a los principales medios de comunicación cubanos, lo que generó controversia en redes sociales.
A pesar de que el diario Granma, el órgano oficial del PCC y con mayor circulación en la isla, destacó el premio de Omara en la categoría de Mejor Álbum Tropical Tradicional por su disco «Vida», los logros de Chucho Valdés y D’Rivera no fueron mencionados en su artículo.
Asimismo, el Premio a la Excelencia Musical entregado a Arturo Sandoval, considerado uno de los mejores trompetistas de la historia de Cuba, también pasó desapercibido.
Las tres grandes figuras comparten un lazo común: la agrupación Irakere, cuyo legado en la música popular cubana y el jazz latino ha sido ampliamente reconocido tanto a nivel nacional como internacional.
¿Olvido intencionado o simple omisión? Aquellos que siguen la trayectoria de estos artistas saben que sus carreras están llenas de éxitos, pero no son desconocidas sus posiciones en relación al gobierno de La Habana, lo que podría explicar su exclusión de los medios estatales cubanos.
Mientras tanto, en redes sociales no solo se celebró a los ganadores, sino que también surgieron polémicas y memes.
Los usuarios en distintas plataformas comentaron que ni siquiera la notoriedad de Irakere fue suficiente para ser mencionada. También surgieron críticas apuntando a que nuevamente, la política estaba interfiriendo en la cultura.
Sandoval dedicó su premio a su esposa, a quien describió como “su fuente de inspiración”. D’Rivera, quien recibió un total de dos galardones en la ceremonia, dedicó uno de ellos a los pueblos de Cuba y Venezuela, mientras que el otro, logrado junto a Chucho Valdés, fue un agradecimiento a su compañero, su amigo y a su padre.
Tras el anuncio de su segundo premio, que compartieron, ambos artistas vivieron un emotivo momento al abrazarse en el escenario. Era la primera vez en mucho tiempo que grababan juntos, y se expresaron su gratitud mutua. De hecho, Paquito mencionó que solo una persona había influido en su carrera musical tanto como su padre, y esa persona era Chucho, quien lo llevó a un estudio para grabar profesionalmente por primera vez.
