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Desde el Banco Central de Cuba (BCC) se hacen advertencias sobre las infracciones que cometen los comercios al realizar transferencias a cuentas bancarias personales.
En este sentido, el vicepresidente de la entidad bancaria, Alberto Quiñones Betancourt, ha declarado: “El uso de un código QR vinculado a una cuenta bancaria personal implica realizar una transferencia entre cuentas distintas. Esto es una irregularidad, ya que las cuentas personales no deben ser empleadas para operaciones comerciales, y el pago en línea es el método reconocido por las plataformas comerciales”.
En realidad, las bonificaciones se mantienen en el 6% para los productos y, según la fuente, se “obtienen en los comercios únicamente al pagar mediante el código QR de una cuenta fiscal”, por lo que “si la transferencia se realiza a una cuenta personal, el descuento ya no se aplica”.
Respecto a la apertura de la cuenta bancaria fiscal (CBF), la ONAT ha señalado: “Este tipo de cuenta facilita el proceso de declaración de impuestos, puesto que permite acceder de manera sencilla a los registros necesarios para realizar el cálculo del aporte tributario”.
Para aquellos que aceptan pagos en línea a través del código QR con las plataformas Transfermóvil y Enzona, o que utilizan TPV (POS), algunas ventajas incluyen la eliminación de la manipulación de efectivo y la posibilidad de hacer depósitos directamente en el banco, lo que contribuye a reducir la circulación de efectivo.
Además, se suma la seguridad en el cumplimiento de los pagos de los tributos correspondientes al presupuesto, gestionados a través de la ONAT de una manera más transparente.
