Caso Cousín: un nuevo hecho negativo en la historia del béisbol cubano | Cuba Noticias 360

Lo más Visto

Foto: Toros de Camagüey

Texto: Alejandro Varela

Yosimar Cousín ha solicitado su liberación de la Federación Cubana de Béisbol (FCB). La noticia ha sacudido la agenda mediática del domingo y ha generado un nuevo torbellino de opiniones en torno al pasatiempo nacional cubano. Aunque ya se esperaba, el acontecimiento deja lugar a diversas interpretaciones, ya que la situación del destacado pitcher camagüeyano ha estado generando rumores durante varios meses.

Sin embargo, la solicitud de baja del lanzador de 23 años no es un hecho reciente, sino que hoy fue cuando se hizo público. Fuentes del equipo Toros de Camagüey confirmaron a Cuba Noticias 360 que Cousín pidió su liberación hace unas semanas durante un viaje a La Habana con su padre. A pesar de esto, después de que se conoció su pedido, las autoridades de la provincia y los miembros de la dirección del equipo han intentado negociar entre bastidores para evitar la pérdida de uno de los mejores lanzadores del país.

La razón de la decisión de Cousín es que considera que ha esperado lo suficiente ante las injusticias que ha padecido en el último año. Han pasado varios eventos internacionales sin que él haya sido convocado a una preselección nacional. Todo esto se debe a que en febrero estuvo bajo contrato en Panamá y tuvo problemas para regresar, aunque los detalles de lo ocurrido nunca se han aclarado del todo.

Existen versiones que indican que el joven intentó quedarse en Panamá pero se echó atrás en el último momento, y otros que sugieren que su nombre figuraba en una lista de peloteros que gestionaban salir del país de forma ilegal. Sin embargo, los rumores son abundantemente diversos, pero ninguno ha aportado claridad sobre su situación.

Asumamos que efectivamente intentó salir o quedarse, como se quiera interpretar. En un país ideal, la FCB emitía un comunicado explicando la situación y las sanciones correspondientes. Eso se conoce como dar la cara. Pero, en cambio, solo hubo silencio. Luego llegó la preselección para el Preolímpico, y no se le convocó; lo mismo ocurrió con Curazao, hasta que se desencadenó una gran indignación popular con el Mundial sub 23.

Yosimar Cousín fue, en febrero de 2020, el mejor pitcher del torneo premundial de su categoría celebrado en Honduras y Nicaragua. Su rendimiento en ese evento fue sobresaliente y dejó impresionados a todos los cazatalentos presentes. Entonces, ¿cómo justifican no haberlo incluido en la competencia mundial? De hecho, lo hicieron: el mánager del equipo, Eriel Sánchez, alegó falta de patriotismo como razón para su exclusión.

Ya hemos hablado extensamente sobre lo ocurrido en el Mundial de México y cómo Eriel llevó a cabo uno de los desaciertos más grandes de un directivo cubano en un certamen internacional de béisbol, recordemos que 12 de los 24 integrantes de la selección se quedaron en el país.

Alguien podría pensar que, después de lo sucedido, los errores de Cousín deberían estar perdonados, especialmente considerando que quedan pocos jugadores de su categoría en Cuba. Sin embargo, cuando se convocó otra preselección, esta vez para los Juegos Panamericanos Junior en Colombia a finales de noviembre, su nombre otra vez no figuró. Esa fue la gota que colmó el vaso.

Parece que la situación de Cousín va más allá de las decisiones del Inder, ya que hay versiones que sugieren que esto está relacionado directamente con la Seguridad del Estado. Esto es, al menos, lo que se comenta en redes sociales. Sabemos que en Cuba muchas decisiones se manejan de este modo, y un comentario que podría respaldar esta teoría son unas declaraciones recientes de Eriel, donde se desvincula de la responsabilidad y menciona que la decisión provino de instancias superiores.

A hora comienza la segunda parte de esta historia, ya que queda por ver si logran concederle la famosa liberación al joven y, suponemos, que entonces intente buscar su suerte en otros horizontes. Muchos argumentarán que si eso surge como resultado, los que decidieron tenerlo castigado tenían razón, pues probablemente se hubiera quedado en cuanto tuviera la oportunidad.

Sin embargo, ¿no es más razonable suponer que fue empujado a esta situación por tanta injusticia? ¿Qué opciones tiene un lanzador de tal calibre en un país donde ni siquiera se esfuerzan por transmitir claridad en lo público? También surgirán aquellos que argumentan que la ruptura por parte del gobierno estadounidense del acuerdo MLB-Cuba es la raíz de todos los problemas, y yo me pregunto: ¿era eso la solución mágica para el béisbol cubano? ¿No continuaría la FCB imponiendo sus condiciones para los contratos y llevándose una buena parte?

En 2021, 16 peloteros abandonaron a equipos Cuba en el extranjero: cuatro en el Preolímpico de Florida y 12 en México. Pero la fuga no se detiene, pues en cuanto un nuevo grupo de jóvenes atletas suba a un avión, las oportunidades volverán a presentarse. Si no, solo hay que esperar los Juegos Panamericanos de Cali-Valle. Las razones detrás de estas salidas superan al béisbol; son cuestiones de vida, de buscar un futuro mejor en una isla donde el porvenir se torna cada vez más incierto.

En esta narrativa de peloteros y federativos no hay inocentes. Todos defienden sus intereses y, en muchos casos, no coinciden. Ante tal inestabilidad, las oportunidades se aprovechan en el momento adecuado. La situación de Yosimar Cousín podría compararse con un capítulo de una novela cuyo desenlace ya se conoce, pero que igualmente se lee para ver cómo se desarrolla. De una u otra manera, su futuro no está en Cuba. Tanto usted, como yo y él, somos conscientes de ello. Solo es cuestión de tiempo.

Más Noticias

Últimas Noticias