Imágenes: Refinería Sergio Soto | Facebook
Aproximadamente 250 litros de combustible se han derramado debido a la tapa de uno de los tanques-cisternas que se volcó durante el descarrilamiento ocurrido el pasado sábado en el centro de Cuba, según informaron a los medios locales las autoridades del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma) en Sancti Spíritus.
Lo más preocupante no es solo la cantidad de combustible derramado, que fue detectada la víspera mientras los expertos realizaban labores de extracción; sino que la sustancia química, considerada altamente contaminante, ha llegado hasta un pequeño afluente del río Zaza, ubicado a unos 5 kilómetros del lugar del incidente.
Una vez se localizó el derrame en la tapa del tanque dañado, las fuerzas especializadas lograron controlarlo, aunque ya se había filtrado una cantidad de fuel oil hasta el cauce del agua. Actualmente, se están llevando a cabo trabajos en el área para intentar mitigar el daño ecológico, según declaraciones de Leonel Díaz Camero, delegado del Citma en Sancti Spíritus.
“Estamos preocupados y trabajando para recolectar el fuel oil que se derramó en el riachuelo, con el objetivo de impedir que llegue al río Zaza”, comentó Díaz Camero, quien además subrayó las graves implicaciones que tendría la llegada del combustible al cauce y, por ende, a la mayor reserva de agua de Cuba, la presa Zaza.
Entre las acciones que se están realizando se incluyen la instalación de barreras de contención con tierra y la recolección manual del líquido viscoso, actividades que son particularmente complejas debido a las difíciles condiciones de acceso al lugar del incidente.
El derrame de cerca de 250 litros de fuel oil es, hasta el momento, el único daño ambiental reportado tras el descarrilamiento de un tren que transportaba combustible en el kilómetro 364.2 de la Línea Central, ocurrido a las 14:30 horas del sábado 13 de abril, mientras se dirigía hacia la refinería Sergio Soto, en Cabaiguán, y afortunadamente no se registraron pérdidas humanas.