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Luego de varios días de incertidumbre por la ausencia de información oficial, esta semana se ha confirmado el fallecimiento de Alexey Díaz Salas, la única víctima de la explosión que tuvo lugar el 24 de diciembre en uno de los tanques que almacenaban líquido RC en la planta de asfalto de Sancti Spíritus.
A pesar de su lucha durante varios días por sobrevivir y de haber recibido atención médica urgente en el Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos, Díaz Salas no logró recuperarse de las graves quemaduras que afectaron el 60% de su cuerpo, según lo informado en la publicación de Facebook de Yosdany Morejón, un reportero local que seguía de cerca el caso.
Con anterioridad, el doctor Aliosky Polo Santana, director de la mencionada institución de salud, había comentado a la prensa sobre la seriedad de las lesiones del paciente, quien se encontraba en estado crítico, con un trauma craneal y quemaduras en la parte superior del cuerpo que comprometían su sobrevivencia.
Horas después del incidente que sorprendió a la isla la pasada Nochebuena, un equipo multidisciplinario del Ministerio del Interior (Minint) en la provincia esclareció la causa de la explosión, la cual no tuvo intencionalidad, según las declaraciones del teniente coronel Alexander Ávalos Jorge, jefe del Cuerpo de Bomberos del territorio.
Según el oficial del Minint, el mechero que llevaba el operario de la planta de asfalto provocó el estallido: “Este trabajador se desempeñaba como el candelero de la planta y al pasar cerca del tanque con un mechón en la mano se creó la fuente de ignición”.
“La mezcla explosiva de los vapores absorbió esta fuente de ignición y, considerando que se trataba de un tanque diseñado para almacenar 40,000 litros y que solo contenía alrededor de 5,000, había una gran capacidad vacía donde se concentraban los gases. Al no existir oxígeno en el interior del recipiente, sino solo vapores que generaron esta mezcla explosiva, el incendio trató de liberarse y desató la explosión”, explicó Ávalos Jorge.
Por su parte, el teniente coronel Félix Pérez Ríos, jefe de la Unidad de Enfrentamiento de la Especialidad de Avería, Explosiones e Incendio del Minint, añadió que durante la investigación no se hallaron indicios de trasiego de sustancias.
Al reafirmar que el desastre no fue causado por un sabotaje, la comisión investigadora atribuyó toda la responsabilidad a la manipulación realizada por Alexey Díaz Salas, la única víctima de la explosión.