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La escasez de materiales en el mercado cubano, junto con otras complicaciones derivadas de los cortes de electricidad y la falta de combustible, ha llevado a que la inauguración de la embajada de Corea del Sur en Cuba, que estaba programada para finales de 2024, se posponga hasta principios de 2025.
El portal The Korea Times realizó una serie de entrevistas con varios funcionarios surcoreanos para explicar las razones detrás de este retraso, quienes comentaron sobre los retos logísticos y la obtención de suministros esenciales y mobiliario para la nueva sede, un proceso que ha resultado ser bastante complicado.
Mientras tanto, el personal de la embajada opera desde una oficina temporal en el Centro de Negocios de Miramar, que también alberga la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) y oficinas de ventas de diversas aerolíneas internacionales.
Por su parte, Corea del Sur está solicitando la colaboración de las autoridades cubanas con el fin de acelerar el proceso de establecimiento de su embajada en la isla.
Desde junio, el gobierno cubano ha anunciado que está trabajando en negociaciones para que «lo antes posible» ambas naciones puedan tener sus respectivas representaciones diplomáticas.
Además, el director general de Asuntos Bilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba se reunió hace algunos meses en Seúl con Chung Byung-won, viceministro para Asuntos Políticos del Ministerio de Exteriores de Corea del Sur, en un encuentro en el que se discutieron los detalles sobre la apertura de estas embajadas.
