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Una de las parejas más admiradas y seguidas en el ámbito musical, la cubana Camila Cabello y el canadiense Shawn Mendes, anunciaron su ruptura hace una semana. Pese a que ambos afirmaron haber terminado en buenos términos, la cantante, que protagoniza la reciente adaptación del clásico filme Cenicienta, se adelantó a compartir algunas pistas sobre los motivos de su separación.
“Antes [de la pandemia] me sentía muy agotada. Había estado trabajando casi sin parar desde los 15 años”, lamentó Cabello en el último episodio de Time to Walk, transmitido por Apple TV hace unos días. Al parecer, la ansiedad le ocurrió una mala jugada en su relación.
La grabación de su última película, Cenicienta, se detuvo temporalmente debido a las restricciones, lo que obligó a Cabello a encerrarse en casa junto a Mendes. “Me sentía muy inestable durante la cuarentena. Rompía a llorar al menos una vez al día”, confesó, refiriéndose al impacto que tuvo en ella pasar de un ritmo de trabajo constante a un abrupto cese. La falta de distracciones hizo que su salud mental se deteriorara. “Me quedé sola con mi ansiedad y mi mente. Eso afectó mi relación”, reveló en el programa.
La cantante ya había admitido con valentía que enfrenta problemas de ansiedad y que busca lidiar con ellos para que no interfieran de manera negativa en su vida. “Casi no estaba en casa. No tenía tiempo para conocerme fuera de mi carrera. A eso le sumo mis luchas con la salud mental. Con esos niveles tóxicos de estrés, ni siquiera sufrí un colapso porque, a pesar de todo, continuaba trabajando”, agregó la cantante cubanoamericana de 24 años, según El País.
En mayo de 2020, la actriz y cantante también había hablado abiertamente sobre su trastorno obsesivo compulsivo, derivado de una fuerte ansiedad, durante una entrevista en Wall Street Journal Magazine.
La joven, que inspira a muchas de sus seguidoras y fans, siempre ha abordado con calma y sinceridad los retos emocionales que enfrenta. Desde entonces, ha intentado ver sus problemas de salud mental con una perspectiva positiva, aunque la aparición del coronavirus afectó su estabilidad.
La compositora de “Don’t Go Yet” afirmó que esta difícil etapa impactó también sus relaciones familiares y amistades. “Estaba agotada de muchas maneras y sentía que estaba corriendo una maratón con una pierna rota. Intenté continuar, pero era sumamente complicado”, comentó, añadiendo que le hubiera gustado tener “la valentía de detenerme y pedir ayuda”, animando a quienes lo necesiten a buscar apoyo para mejorar su salud mental.
Esta situación finalmente la llevó a priorizar su bienestar personal. “He probado diferentes tipos de terapia, meditación, ejercicio, cambié mi alimentación y la forma en que organizo mi tiempo para asegurar un balance”, señaló Cabello, quien enfatizó que necesita “tiempo para sí misma” y “sanar”, respondiendo así a las especulaciones sobre su reciente separación.
