Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Fede Gayardo
El aumento en el número de visas de inmigrante denegadas a cubanos que desean reunirse con sus familiares en EE.UU. ha sido notable en las últimas semanas, lo cual ha causado gran preocupación entre aquellos que asisten a sus entrevistas en la Embajada estadounidense en La Habana.
Esta problemática fue puesta de manifiesto en declaraciones compartidas en YouTube por Abel Zaldívar, consultor de inmigración y presidente de Zaldívar Consulting Group LLC, quien señaló que uno de los factores que podría estar influyendo en las denegaciones es la manera en que los funcionarios consulares interpretan el Manual de Asuntos Foráneos (FAM).
“Cuando un cónsul evalúa el nivel de participación de un solicitante en un partido comunista o en un partido totalitario, se guía por tres criterios fundamentales: simpatía, afiliación y membresía”, comentó Zaldívar.
El problema radica en que, bajo este criterio, muchos cubanos son considerados afiliados al Partido Comunista simplemente por haber trabajado en entidades estatales o instituciones gubernamentales.
El Manual de Asuntos Foráneos indica que “todo empleo o asociación generalmente se considera una afiliación a un partido prohibido”, lo que significa que trabajar en sectores como la educación, el suministro de agua o la electricidad podría interpretarse como una conexión política, incluso si el trabajador no ha sido miembro del Partido.
Más adelante, el especialista ilustró con el caso de un empleado de Aguas de La Habana a quien le fue negada la visa, afirmando que “no es que lo consideren comunista, es que sospechan que es afiliado al partido comunista porque trabaja en una empresa estatal”.
Este aspecto, señala, resalta la ambigüedad de los criterios utilizados, especialmente considerando que la mayoría de los trabajadores en Cuba dependen del empleo estatal, lo que podría perjudicar su solicitud de visa para la reunificación familiar.
Otro factor digno de análisis es el historial de viajes al exterior y la tenencia de pasaportes oficiales. En este contexto, Zaldívar advierte que “a partir de ahora, todo quedará a la discreción del cónsul”, lo que incrementa la incertidumbre para quienes aplican.
Como recomendación, el director de la consultoría de inmigración sugirió a los interesados que se preparen de manera exhaustiva para sus entrevistas y, en caso de una negativa, busquen asesoría profesional para evaluar las posibles opciones de apelación.