Foto: Roy Leyra
La Mayor de las Antillas atraviesa su momento más crítico en salud desde el inicio de la pandemia en 2020. Con 6279 nuevos casos y 62 fallecidos reportados por las autoridades este domingo, el futuro parece sombrío. En respuesta, el gobierno ha anunciado una actualización de los protocolos implementados en la Isla para combatir el virus.
Según informaron medios estatales, en la reunión del Grupo Temporal de Trabajo se aprobó la modificación del protocolo para el diagnóstico y manejo clínico de los pacientes confirmados, sospechosos y contactos de quienes han dado positivo a la enfermedad.
En el encuentro, presidido por el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, se comunicó que cambiarán las pautas relacionadas tanto con el diagnóstico y manejo clínico como con la clasificación del riesgo y los síntomas que presenten las personas.
¿Cuáles son las nuevas modificaciones? Según el ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda, aquellos que den positivo en la prueba de antígeno se someterán a un PCR y comenzarán el tratamiento terapéutico de inmediato, sin esperar el resultado de este último.
Un aspecto que ha causado inquietud es el ingreso domiciliario, lo que evidencia el colapso sanitario en la Isla, debido a la falta de camas para atender a todos los contagiados.
La nueva normativa establece que los casos confirmados como positivos, que sean clasificados como de bajo riesgo, asintomáticos o con síntomas leves, permanecerán en su hogar. En cambio, se enviará a las instituciones a aquellos positivos de bajo riesgo que presenten síntomas moderados, así como a aquellos de mediano y alto riesgo con síntomas leves o moderados.
Las personas que bajo ninguna circunstancia serían admitidas en el hogar son:
- Quienes vivan en condiciones que no permitan el cumplimiento de medidas de aislamiento y tratamiento.
- Los que no pueden acceder al consultorio para el seguimiento debido a distancias.
- Miembros de familias disfuncionales.
- Menores de 12 años.
- Embarazadas y puérperas.
- Niños de 12 a 18 años con patologías crónicas asociadas.
- Pacientes con enfermedades crónicas descompensadas o en condiciones críticas que puedan llevar a una situación grave.
Otras modificaciones incluyen que los contactos de casos confirmados deberán realizar un aislamiento de 14 días en su hogar, bajo vigilancia clínico-epidemiológica para detectar posibles síntomas que pudieran aparecer.
Además, se reducirán los estudios poblacionales, dada la cantidad de PCR que deben evaluarse diariamente en las provincias, lo que hace imposible llevar a cabo tales estudios. Se priorizarán las pesquisas para la identificación de casos asintomáticos.
A los viajeros se les realizará una prueba de antígeno y, si resulta positiva, se procederá a un PCR. Antes de finalizar la cuarentena establecida, se les realizará otro PCR.
Los pacientes que aún sean positivos después de 14 días o más, pero sin complicaciones clínicas, recibirán el alta y se les dará seguimiento desde su hogar.
De acuerdo con altos funcionarios del Ministerio de Salud Pública, el nuevo protocolo permitirá una mejor atención a quien esté ingresado en las instituciones.
Desde provincias como Matanzas se reportan altas cifras de contagio. La atención a tantos casos se ha visto comprometida por la escasez de espacio en las instituciones y recursos médicos, lo que colapsa la capacidad de los hospitales. Según el gobernador de la Atenas de Cuba, Mario Sabines Lorenzo, en esa región se requieren al menos 3000 camas para satisfacer la demanda.