Foto: Prensa Latina
El voleibolista cubano Miguel Ángel López se coronó con el premio de Jugador Más Valioso (MVP) al liderar a su equipo, Sada Cruzeiro de Brasil, hacia la victoria en el Campeonato Mundial de Clubes de Voleibol de la FIVB, que tuvo lugar en la ciudad brasileña de Betim.
López, de 24 años, se convirtió en el máximo anotador de la final al conseguir doce puntos ante el campeón defensor, Lube Civitanova de Italia, que finalmente cedió la victoria en tres parciales, con marcadores de 17-25, 22-25 y 23-25, según lo reportado por Play Off Magazine.
“No tengo palabras para describir nuestra actuación; es un día muy significativo en la historia de nuestro club. Fuimos fuertes desde el primer hasta el último punto del torneo, y estoy muy orgulloso de cada uno de nosotros”, comentó el cubano al sitio web de FIVB tras concluir el partido.
“Para mí, todo nuestro equipo es el Jugador Más Valioso. Todos realizaron su labor de manera excepcional y estoy orgulloso de mi equipo. Mi servicio no estuvo a la altura en el partido inaugural, pero mis compañeros me brindaron toda la confianza que necesitaba para continuar”, añadió.
Así, el Sada Cruzeiro alcanzó su cuarto título en la historia de estos torneos, habiéndose coronado previamente en los años 2013, 2015 y 2016, y ahora solo es superado por el club italiano Trentino Itas, que ha logrado el oro en cinco ocasiones.
Por parte de la Lube Civitanova de Italia, también destacaron los cubanos Marlon Yant, quien acumuló 11 puntos, 10 de ellos en ataque, con un 59 por ciento de efectividad y un ace; mientras que Robertlandy Simón terminó con 6 puntos en ataque, alcanzando un 75 por ciento de efectividad, además de sumar uno desde la línea de servicio.
Con este galardón como MVP del Mundial de Clubes de Voleibol, López se une a una selecta lista que incluye los nombres de otros destacados cubanos, como el receptor/atacante Osmany Juantorena y el atacante Yoandy Leal.
Además de los premios individuales y colectivos, el torneo dejó múltiples alegrías a la afición cubana y sirvió como vitrina para exhibir al mundo a dos grandes talentos del voleibol cubano de los últimos años: Miguel Ángel López y el también veinteañero Marlon Yant.
