Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Hugo León
El gobierno de Cuba ha decidido suspender las clases en las provincias del occidente del país, como parte de las medidas de preparación ante la llegada de la tormenta tropical Rafael, que se anticipa que impactará la isla con fuerza de huracán.
Las autoridades han determinado incluir en la suspensión de las actividades educativas a todas las provincias que se encuentran en fase de alerta ciclónica. Esto significa que, a partir de este martes, no habrá clases en Matanzas, Mayabeque, La Habana, Artemisa, Pinar del Río e Isla de la Juventud.
En la noche del lunes, la Presidencia de Cuba utilizó las plataformas de redes sociales para comunicar esta decisión, solo unas horas después de que el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil emitiera la alerta ciclónica a partir de las 3:00 pm del lunes en los territorios mencionados.
Por otro lado, los estudiantes que se encuentran en régimen de becas continúan sin regresar a las aulas tras el fin de semana, según indicó la ministra de Educación, Naima Ariadne Trujillo, el domingo pasado.
Mientras tanto, las provincias que abarcan desde Villa Clara hasta Camagüey permanecen en fase informativa desde el domingo, y las autoridades han instado a mantener mucha precaución respecto al comportamiento de las lluvias que se asocian con el inminente huracán Rafael.
El organismo hidrometeorológico predice que el fenómeno llegará al occidente cubano durante la tarde del miércoles con intensidad de huracán, según coinciden tanto los modelos de pronóstico como las previsiones de expertos cubanos y estadounidenses.
Aunque se anticipa una intensificación continua durante las próximas horas, la velocidad de translación, que es de casi 20 kilómetros por hora, podría limitar el tiempo disponible para que el huracán adquiera más fuerza en el Mar Caribe antes de impactar Cuba.
La respuesta de las autoridades cubanas ante la llegada del huracán Rafael se contrasta con la escasa preparación que se tuvo antes del impacto del huracán Oscar en el este de la isla. En aquella ocasión, el país enfrentaba un apagón total, lo que afectó su capacidad de respuesta previa al paso del meteoro; sin embargo, el despliegue informativo y las acciones que se están llevando a cabo en esta ocasión han sido significativamente más amplios.
