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El Gobierno de Estados Unidos ha tomado nuevas medidas contra la inmigración al suspender temporalmente las solicitudes de green card o residencia permanente para refugiados y asilados.
Según informes de la cadena CBS, esta decisión se debe a fraudes detectados y considera la suspensión como un “ajuste de estatus“.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS, por sus siglas en inglés) ha informado a su personal que se debe detener, hasta nuevo aviso, cualquier proceso relacionado con inmigrantes que llegaron al país como refugiados o a través del asilo.
“Algunas solicitudes pendientes serán objeto de un examen más riguroso para identificar posibles fraudes, así como amenazas a la seguridad pública o nacional”, declaró el Departamento de Seguridad Nacional en un comunicado enviado a CBS.
Además, un portavoz de USCIS confirmó a NBC News que esta medida está en línea con la orden ejecutiva 14161 firmada por Trump, la cual tiene como objetivo proteger a Estados Unidos “de terroristas extranjeros y otras amenazas a la seguridad nacional y pública”.
Esta reciente decisión se añade a la extensa lista de acciones adoptadas contra los inmigrantes por la Administración Trump desde que asumió el cargo el 20 de enero de 2025. Entre las medidas destacan la eliminación del CBP One. Recientemente, se revocó el estatus legal en el país y las visas de trabajo para los beneficiarios del parole humanitario, dejando a unas 530 mil personas sin protección contra la deportación en todo el territorio nacional.
