Foto: Jorge Luis Borges
En tiempos recientes, los cubanos han manifestado su preocupación por la dificultad de encontrar guarapo en Cuba, especialmente en La Habana, y han lamentado la imposibilidad de refrescarse con esta bebida, a diferencia de épocas pasadas en las que era común hallarla en cualquier rincón.
El guarapo ha desaparecido de muchas cafeterías cubanas y hoy en día resulta bastante complicado encontrar un lugar que lo ofrezca en el país.
Los cubanos se cuestionan cómo es posible que en otras naciones sea tan sencillo encontrar un vaso de guarapo, mientras que en la isla, con su rica tradición de cañaverales, este manjar brilla por su ausencia.
El internauta Abel Sánchez fue uno de los que expresó su descontento por la falta de esta mítica bebida en los establecimientos cubanos.
“Hace unos días compartí la publicación de un cubano preocupado por la escasez de guaraperas en Pinar del Río. Algo que solía ser muy común en cualquier lugar de nuestro país donde se cultivara caña de azúcar. Es triste esta realidad, pero lo que me resulta más vergonzoso es ver en una ciudad a más de 2500 metros sobre el nivel del mar y a más de 200 km de los cañaverales, en pleno corazón de Bogotá D.C., una guarapera artesanal y portátil en plena calle”, escribió.
“Sin grandes infraestructuras ni recursos, mientras en mi Cuba surgen miles de obstáculos que impiden que los cubanos disfruten de un refrescante guarapo. Ojalá esta situación cambie pronto, nuestro pueblo lo necesita”, agregó.
En 2022, el periódico Sierra Maestra, de Santiago de Cuba, elogiaba las cualidades del guarapo, aunque reconocía que “esta tradición se está perdiendo”.
“Al recorrer el territorio cubano, se pueden encontrar algunas guaraperas en pueblos y a lo largo de las carreteras, aunque hay que señalar que esta tradición está en riesgo y debemos recuperarla porque forma parte de nuestra idiosincrasia y cubanía”, indicó el diario.
Además, destacó la facilidad de su preparación. “Solo toma alrededor de 15 minutos, y sus ingredientes son: caña de azúcar y hielo bien picado; para procesarlo hay que pelarlo y pasarlo por el trapiche, se le añade el hielo al gusto y ya está; hay quienes prefieren añadirle unas gotas de limón”.
Todo parece indicar que el guarapo, a pesar de la sencillez con la que se elabora y su rica historia en Cuba, podría sumarse a la creciente lista de «especies» en peligro de extinción en el país.