Foto: RRSS
Texto: Hugo León
El número de fallecidos a causa del huracán Oscar en el oriente cubano ha aumentado a ocho, según la información oficial proporcionada hoy por el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil.
La actualización anunciada este miércoles a través de la prensa estatal indica que han perdido la vida ocho personas y dos niños han resultado heridos, mientras que al menos dos ciudadanos aún se encuentran desaparecidos.
Las víctimas del huracán Oscar han sido identificadas como:
Ramón Díaz Matos, de 86 años, del municipio de Imías.
Francisco Colombia Matos, de 92 años, de San Antonio del Sur.
Esmeraldo Noah Fiffe, de 82 años, residente en San Antonio del Sur.
Antolino Arias Domínguez, de 84 años, residente en San Antonio del Sur.
Alexander Saben Matos, de 42 años, residente en San Antonio del Sur.
Iriannis Labañino Domínguez, de 31 años, residente en San Antonio del Sur.
Liz Anyi Elíaz Labañino, de 5 años, residente en San Antonio del Sur.
María Martha Osorio Matos, de 81 años, residente en San Antonio del Sur.
Por otro lado, aún se encuentran sin ser localizados los ciudadanos cubanos Kaliannis Hernández Urgellés, de 35 años, y Orlenis Gamboa Pérez, de 42. En redes sociales se han reportado hallazgos de otros dos cadáveres.
Esta información ha circulado en medios no estatales, sin embargo, los canales de la Defensa Civil aún no han confirmado dicha noticia. Asimismo, no se ha clarificado si los dos cuerpos encontrados corresponden a víctimas ya identificadas.
Hasta el momento no se ha especificado la causa de los decesos, aunque se sospecha que podrían deberse a ahogamiento, ya que la región fue severamente afectada por lluvias que provocaron inundaciones.
A lo largo de los años, Cuba ha adquirido una notable experiencia en la prevención y mitigación de los daños ocasionados por huracanes y fenómenos hidrometeorológicos en general, pero en esta ocasión, muchos consideran que cientos de guantanameros se enteraron del huracán Oscar a última hora.
Esta percepción ha cobrado fuerza, ya que días antes de la llegada del fenómeno, toda la isla de Cuba sufrió un apagón debido a una falla generalizada en el sistema electroenergético.
