Foto: RL Hevia
Todos los actores económicos en Cuba –tanto del sector privado como del estatal– que se consideren altos consumidores de energía deberán garantizar que el 50 % de la electricidad que consumen durante las horas pico diurnas provenga de fuentes renovables. Tienen un plazo de hasta tres años para llevar a cabo estas instalaciones.
No obstante, aquellos que, debido a limitaciones de espacio o a la estructura de las cubiertas de su instalación o edificación, no puedan instalar paneles fotovoltaicos, deberán formalizar contratos de potencia instalada con la Unión Eléctrica.
Así lo indica un nuevo Decreto publicado este martes en la Gaceta Oficial, que establece las regulaciones para el control y uso eficiente de los portadores energéticos y las fuentes renovables de energía.
Con esta medida, el Gobierno busca “solucionar” la crisis energética que atraviesa el país desde hace varios años, ya sea a través de la acción de los actores económicos o mediante pagos al Estado.
La norma también se aplica a las modalidades de inversión extranjera, oficinas de representación y sucursales, así como a dependencias u otras representaciones de instituciones extranjeras y formas asociativas.
Asimismo, se requerirá la creación de un programa para el desarrollo, mantenimiento y sostenibilidad de las fuentes renovables y el uso eficiente de la energía, con un horizonte de cinco años. Este programa deberá incluir las metas que se pretenden alcanzar, así como el capital humano y financiero necesario, y será actualizado anualmente.
El incumplimiento de estas normativas podría acarrear consecuencias para los actores estatales, que van desde la interrupción del servicio eléctrico por hasta 72 horas hasta la reducción a la mitad del combustible administrativo durante un período de tres meses.
Por otro lado, los actores privados y las modalidades extranjeras también enfrentarán la misma interrupción de hasta 72 horas si la actividad económica no se desarrolla en la vivienda, además de la posibilidad de ser multados con hasta 15,000 pesos cubanos.
Cuba aspira a que en 2030 el 24% de su matriz energética provenga de fuentes renovables, por lo que esta nueva norma busca avanzar hacia un objetivo que aún no se presenta como totalmente alcanzable.