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Texto: Hugo León
Juanita Castro, la hermana menor de Fidel y Raúl Castro, quien emigró de Cuba en la década de 1960 y se convirtió en una crítica de la gestión en la isla, falleció este lunes en Miami a la edad de 90 años.
Según reportes de medios locales, su muerte se produjo en un hospital de la mencionada ciudad, debido a causas naturales. Su familia ha decidido no ofrecer entrevistas ni realizar un funeral público, según fuentes cercanas a la difunta.
En el momento de su deceso, estaba acompañada por su hermana Enma y otros miembros de la familia.
El nombre de Juanita adquirió relevancia tras su salida de Cuba hacia México en 1964, desde donde se trasladó a Estados Unidos, donde se dedicó a la activismo y los negocios. Su postura crítica hacia sus hermanos la convirtió en un rostro conocido dentro de la emigración cubana.
Para la periodista mexicana María Antonieta Collins, de la cadena Univisión, Juanita fue “un personaje extraordinario de los que no vuelven a aparecer”, una mujer que sacrificó todo por sus ideales y que dejó enseñanzas valiosas.
Asimismo, la comunicadora rememoró algunas de las declaraciones de Juanita sobre sus hermanos, quienes gobernaron Cuba durante décadas: “por mis hermanos no hay odio de hermanos ni de seres humanos, sino una discrepancia total de opiniones”.
“Cada persona defiende su perspectiva y yo seguiré defendiendo esta, que es la mía”, añadió la periodista al recordar las palabras de la fallecida.
Juanita, la quinta de los siete hijos de la familia Castro Ruz, nunca regresó a Cuba tras su partida hacia México. Antes de 1959, cuando sus hermanos luchaban contra el gobierno de Batista, ella se encargaba de recolectar fondos para la causa; después de que el movimiento revolucionario alcanzara el poder, se dedicó a iniciativas sociales, como la construcción de hospitales en áreas rurales del país.
Según su biografía, su oposición al gobierno encabezado por sus hermanos comenzó cuando las políticas del nuevo régimen comenzaron a afectar a la propia familia.
Además, historiadores indican que antes de salir de Cuba, Juanita llevó a cabo actividades clandestinas y ayudó a quienes eran perseguidos por la contrainteligencia cubana, conocida como G2.
En 2009, publicó un libro de memorias titulado “Fidel y Raúl, mis hermanos: la historia secreta”, escrito en colaboración con la periodista María Antonieta Collins.
