Autor: Karla Castillo
Se ha hablado extensamente sobre «La Bola», pero sigue circulando debido a personas que, aun con las advertencias, confían en el juego (o montaje) y deciden probar suerte. Con la promesa de invertir y ver multiplicada su inversión sin ningún esfuerzo, ¿cómo no caer en la trampa en el contexto económico actual del país?
Se dice y se repite: esta es una estafa piramidal, es una bola, como se diría coloquialmente en Cuba. Sin embargo, en las redes sociales y en las plataformas más populares del país, se difunde constantemente la idea de que al entrar, se gana.
Para aclarar: se trata de una estafa que fue ideada por el emigrante italiano Carlo Ponzi hace más de un siglo, reconocida hoy en día como una de las más comunes. Si él pudiera observar el impacto de su creación entre los cubanos, probablemente estaría orgulloso.
Todo depende de que el número de participantes siga creciendo, y que estos aporten su capital para pagar a los inversores actuales, y así sucesivamente. Es importante destacar que no genera ganancias reales, ya que no es un negocio ni un trabajo, sino simplemente capital ajeno.
A gran escala, puede ofrecer enormes beneficios a los promotores. La promesa es que, si ingresas 500 CUP, recibirás 4 000, pero si se detienen las entradas de nuevos inversores, el esquema colapsa.
El funcionamiento se organiza en niveles: Fuego, Aire, Tierra y Agua. En el primer nivel, se encuentran las ocho casillas para principiantes que aportan los 500 CUP. Luego sigue el nivel de Aire, donde la pirámide se divide en dos, y quienes llegan a este nivel deben reclutar a ocho nuevas personas que entrarán como novatos y también deberán aportar el dinero.
En el nivel Tierra, hay espacio para dos personas, mientras que en el nivel Agua, quienes han podido avanzar cobran sus 4 000 CUP. Así, es necesario que las ocho casillas del nivel Fuego se llenen continuamente para que el esquema funcione, ya que el dinero que allí se aporta es lo que recoge quien se encuentra en el centro de la esfera. Solo se avanza al siguiente nivel cuando los superiores están vacíos.
Parece complicado, pero es bastante sencillo. Cuando se detiene la entrada de nuevas personas a «La Bola», no puedes avanzar de nivel, por lo que no se cumple la promesa de los miles de pesos. Te conviertes en un estafador o estafado, porque aunque puedas obtener ganancias, ¿qué pasa si las personas que convenciste para unirse no logran completar el ciclo?
Hay quienes han tenido éxito, pero el riesgo que se corre no justifica la recompensa. Yani, una mujer de 43 años del municipio Diez de Octubre, compartió con Cuba Noticias 360 que recientemente disfrutó de una caja de cerveza gracias a lo que su esposo ganó en «La Bola». Mei, de 22 años, también se unió y recibió su dinero, pero ha decidido no participar más, ya que tiene amigos que fueron estafados, al igual que cientos de otros.
Un consejo sabio: no dejarse engañar por la ilusión de dinero fácil.
