En estos días no se habla de otra cosa. La Copa Mundial de Fútbol ha captado la atención de millones de aficionados. Muchos han quedado sorprendidos, ya que los grandes favoritos se han despedido de manera inesperada. Así, dos destacados futbolistas se han ido sin poder mostrar su mejor versión en el terreno de juego. Hablamos de Cristiano y Neymar.
Qatar no es solo una competición; perder aquí significa perder un sueño, e incluso, puede representar la desilusión de un país. Esto ha quedado evidenciado en los mensajes que los propios jugadores, así como sus allegados y seguidores, han compartido en las redes sociales.
“Estoy psicológicamente destruido. Esta ha sido, sin duda, la derrota que más me ha dolido. Me dejó paralizado durante 10 minutos y, justo después, caí en un llanto incontrolable. Esto dolerá por mucho tiempo, desafortunadamente. Luchamos hasta el final, de lo cual estoy orgulloso, al igual que mis compañeros, porque nunca faltó compromiso ni dedicación. Este grupo lo merecía, nosotros lo merecíamos, BRASIL lo merecía…”, compartió Neymar en su perfil de Instagram.
Agregó: “¡Pero esta no fue la voluntad de DIOS! Cada sacrificio valió la pena para sentir el cariño de cada uno desde el campo… Gracias a todos por su apoyo a nuestra selección. Lamentablemente, no funcionó… Esto dolerá por mucho, mucho tiempo. Gracias por todo, mi DIOS, me has dado todo para no quejarme. Solo gracias por cuidarme. Todo el honor y la gloria siempre son para ti, sin importar las circunstancias”.
Por su parte, Cristiano expresó: “Ganar una Copa del Mundo para Portugal fue el sueño más grande y ambicioso de mi carrera. Afortunadamente, he ganado muchos títulos de relevancia internacional, incluyendo con Portugal, pero poner el nombre de nuestro país en lo más alto del mundo fue mi mayor anhelo. Luché por ello, esforzándome arduamente por este sueño. En mis 5 participaciones en Copas del Mundo a lo largo de 16 años, siempre estuve al lado de grandes jugadores y apoyado por millones de portugueses, dejándolo todo en el campo. Nunca me volteé ante la lucha y nunca renuncié a ese sueño; lamentablemente, ayer el sueño llegó a su fin”.
Concluyó diciendo: “No vale la pena reaccionar impulsivamente. Solo quiero que todos sepan que se ha dicho mucho, se ha escrito mucho y se ha especulado mucho, pero mi dedicación a Portugal no ha cambiado ni por un instante. Siempre fui uno luchando por el objetivo común y nunca le daría la espalda a mis colegas ni a mi país. No hay mucho más que decir por ahora. Gracias, Portugal. Gracias, Qatar. El sueño fue hermoso mientras duró… Ahora, confío en que el tiempo será un buen consejero y permitirá que cada uno saque sus propias conclusiones”.
Antes de esta publicación, su esposa Georgina Rodríguez mostró en sus historias su admiración hacia la estrella, así como su desacuerdo con la decisión de su entrenador: “Hoy, tu amigo y entrenador tomó una mala decisión. Ese amigo al que le has expresado tantas palabras de admiración y respeto. El mismo que, al ingresarte al juego, vio cómo todo cambió, pero ya era tarde. No se puede subestimar al mejor jugador del mundo, su arma más poderosa. Tampoco se puede apoyar a alguien que no lo merece. La vida nos enseña lecciones. Hoy no hemos perdido, hemos aprendido. Te admiramos, Cristiano”.
