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Eduardo Sosa ha fallecido en la madrugada de este miércoles en Guantánamo, tras varios días hospitalizado debido a un derrame cerebral que lo mantuvo en estado crítico, según un comunicado del Instituto Cubano de la Música.
El trovador cubano estuvo ingresado en el Hospital General Docente Dr. Antonio Agostinho Neto desde el 3 de febrero y, en las últimas horas, su pronóstico se tornó cada vez más grave.
Lamentablemente, Sosa no logró experimentar mejoría en su estado neurológico y su situación fue deteriorándose debido a complicaciones respiratorias infecciosas, así como a un fallo renal agudo, haciendo su salud cada vez más crítica.
Como se ha informado previamente, el artista cubano padeció un accidente cerebrovascular mientras realizaba un recorrido por la zona guantanamera, participando en la Cruzada Teatral y en los debates del X Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
Después de 10 días en el hospital, ha fallecido, dejando tras de sí una ola de solidaridad en la comunidad cultural cubana, así como entre familiares y amigos, quienes enviaban constantemente mensajes de aliento y recuperación.
“La calidad de su obra como compositor, sus excepcionales habilidades como intérprete, su profunda cubanía y su inquebrantable compromiso con la Revolución le brindaron el gran prestigio y liderazgo que alcanzó entre los músicos cubanos, ganándose la admiración y el cariño de su pueblo.
“Por decisión familiar, su cuerpo será cremado y se le rendirá homenaje póstumo en el cine de su natal Mayarí y, posteriormente, en la Casa de la Trova de Santiago de Cuba. Sus cenizas serán depositadas en el cementerio de Santa Ifigenia.
En nombre del Ministerio de Cultura, expresamos nuestras más sinceras condolencias a familiares, amigos y admiradores de tan destacado y querido artista”, señala el comunicado más reciente del Instituto Cubano de la Música.
