Foto: Aris Messinis | AFP
La invasión rusa a Ucrania ha dejado un saldo trágico, con más de un centenar de civiles fallecidos, según informes del Alto Comisionado para los Derechos Humanos. La cifra exacta de muertos se eleva a 136, de los cuales 13 son niños.
“Desde la mañana del 24 de febrero hasta la medianoche de anoche, nuestra oficina ha registrado 136 bajas civiles en Ucrania”, declaró Liz Throssell, portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, durante una conferencia de prensa en la ONU en Ginebra.
Las muertes se atribuyen principalmente al uso de armas explosivas que generan un impacto extendido, incluyendo bombardeos de artillería pesada, ataques de sistemas de lanzamiento de cohetes múltiples y ataques aéreos.
El organismo internacional advierte que el número real de víctimas podría ser considerablemente mayor de lo que se ha podido verificar hasta ahora. Además, han contado más de 400 heridos como resultado de los ataques rusos.
En ese contexto, el Servicio de Emergencias de Ucrania reportó que más de 2,000 civiles han perdido la vida desde el inicio de la ofensiva militar rusa el pasado jueves, una cifra que contrasta con las afirmaciones de las autoridades rusas sobre la protección de la población.
Por otro lado, las milicias en la región de Donbás, en el este de Ucrania, denunciaron que en las últimas 24 horas, varios bombardeos del ejército ucraniano han dejado como resultado la muerte de una decena de personas.
Asimismo, datos de la ONU indican que ya son 677,000 las personas que han cruzado a países vecinos en busca de refugio. En los últimos días, han surgido denuncias de discriminación por parte de los países limítrofes, que habrían permitido la entrada a ciudadanos ucranianos, pero no a otros migrantes que también intentaban huir de la invasión rusa.