Foto: RFEA
Texto: Raúl del Pino
Las destacadas actuaciones de Cuba al inicio de la temporada al aire libre en atletismo están marcadas por el triple femenino. Leyanis Pérez y Liadagmis Povea han sido las protagonistas de esta disciplina, con los mejores registros de la presente campaña, dejando a un lado, por supuesto, a la extraordinaria Yulimar Rojas.
En este contexto, la joven pinareña Pérez ha sido la sorpresa más grata del inicio del verano, mostrando una línea de progreso en constante ascenso, tal como evidenció este jueves frente a la mismísima plusmarquista mundial venezolana.
Desde que la cubana de 21 años consiguiera un salto de 14.84 metros a finales de mayo en Marruecos, la anticipación por el duelo contra Yulimar se había generado, conscientes de la superioridad de la campeona olímpica de Tokio 2021. La competencia quedó programada para la quinta parada de la Liga del Diamante, en Oslo, Noruega.
Sin embargo, antes de este encuentro, la atleta suramericana se encargó de reclamar lo que le corresponde en Madrid el pasado domingo, donde con un salto de 14.96 metros, ascendió a lo más alto del ranking de la temporada. En ese evento, Povea también se destacó al lograr un salto de 14.83, posicionando a las dos cubanas en los puestos dos y tres de la clasificación mundial.
Este jueves, únicamente Pérez representó a Cuba en la capital noruega, y desde su primer intento se enfrentó a Yulimar, cediendo la victoria por solo cuatro centímetros, pero lo más relevante es que volvió a mejorar su marca personal.
En resumen, Rojas se llevó la competencia con un salto de 14.91 en su primer intento, mientras que Leyanis respondió con un salto de 14.87, logrando así la segunda posición. Ninguna de las dos pudo superar esas marcas, aunque también lograron otros buenos saltos de 14.86 y 14.79, respectivamente.
“Enfrentar a Yulimar por primera vez este año y hacerlo de esta manera le proporciona la confianza necesaria para saber que en cualquier momento puede ganarle. Ya ha competido contra las mejores triplistas del mundo y ha demostrado que posee tanto talento como condiciones físicas, dos aspectos que no siempre están alineados”, comentó un entusiasta entrenador Ricardo Ponce al diario deportivo Jit.
Ahora, ambas cubanas dejarán las competencias europeas temporalmente y regresarán a Cuba, para luego participar en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en San Salvador, que comienzan a finales de junio. Posteriormente, regresarán al Viejo Continente para preparar la recta final de su entrenamiento de cara al Campeonato Mundial de Budapest, en agosto.