Foto: RRSS
En el partido de béisbol celebrado el martes entre Industriales y Matanzas, los protagonistas no fueron los jonrones, sino tres “apagones” que interrumpieron el juego en el Estadio Latinoamericano de la capital.
Cuando el marcador indicaba cuatro a uno a favor de Industriales en el segundo inning, se produjo el primer apagón. Los narradores informaron que “hubo una dificultad con las luces, y el partido se detuvo justo cuando Drake realizó el out”, comentaba uno de los analistas deportivos.
En ese primer incidente, el Latino permaneció iluminado solo por las luces auxiliares que iluminaban parcialmente el terreno, mientras los aficionados encendían las pantallas de sus celulares.
El segundo apagón de la 61 Serie Nacional afectó al “Coloso del Cerro”, llevando a los periodistas deportivos a opinar que “habría que revisar ciertos problemas para el juego de mañana”, ya que era evidente que no se resolverían durante la jornada actual.
A pesar de los “detalles técnicos”, los peloteros de Industriales aprovecharon el tiempo para anotar otra carrera justo antes del tercer corte eléctrico “para hacerlo más dramático”, según los narradores.
Uno de los comentaristas observó: “Lo cierto es que el juego no ha defraudado, ya que este ha sido el sello de la Serie Nacional”, y eligió el momento perfecto para hacer tal comentario, dado que los cortes duraron un promedio de 30 minutos cada uno.
Frente al video del incidente que circuló en las redes, varios usuarios criticaron la “naturalidad” con la que los narradores manejaron las interrupciones, así como la seriedad con la que los organizadores están tratando la Serie Nacional de Béisbol, que debería ser concebida como un espectáculo para el disfrute del público.
Durante la interrupción eléctrica, cuya causa aún no ha sido aclarada, los aficionados en el Latino adoptaron un espíritu festivo típico de los apagones: en algunos videos se puede apreciar que la conga del estadio continuó y que muy pocos abandonaron el lugar, esperando el final del partido.
“Hoy juega Matanzas contra Industriales y, casualmente, se va la luz en tres ocasiones en el mejor estadio de Cuba, lo cual deja mucho que pensar. Sin embargo, me parece vergonzoso que un juego se detenga porque se apague la luz, pero más vergonzoso es que se permita continuar jugando sin el alumbrado completo…”, comentó una aficionada en el grupo de Facebook Los cocodrilos.
Aunque puede parecer entretenido, estos cortes eléctricos no son precisamente sinónimo de un espectáculo de calidad, y además pueden poner en riesgo la seguridad de los espectadores en las gradas.