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En la jornada de ayer, la selección española se enfrentó a Suiza en San Petersburgo. El partido culminó en una emocionante tanda de penaltis, donde el portero español destacó enormemente, permitiendo que La Furia avanzara a las semifinales del torneo y dejando a Suiza eliminada. Sí, eliminada, pero… ¡qué impresionante actuación tuvieron Los Navajos!
Desde el inicio, España comenzó a presionar, y en el minuto siete, un gol en propia puerta de Zakaria colocaba a Suiza en desventaja. Fue solo hasta el minuto 68 que Xhaquiri, el capitán suizo, igualó el marcador, exponiendo las debilidades en la defensa española. Ocho minutos después, Remo Freuler fue expulsado con tarjeta roja directa tras una decisión polémica del árbitro.
A pesar de jugar con un hombre menos, los suizos no se desanimaron; resistieron las constantes acometidas del equipo español y, con más determinación que buen juego, lograron forzar la prórroga. Sin embargo, el tiempo extra no fue suficiente para que España rompiera el empate. Tras 120 emocionantes minutos, llegó la tan esperada tanda de penaltis, que la nación de 8.5 millones de habitantes aguardaba con esperanza de que la suerte les sonriera. Si la suerte viniera en frascos, Unai Simons se los habría bebido todos, ya que atajó dos penales cruciales que sellaron la victoria española.
En otro enfrentamiento, la llamada generación dorada de Bélgica quedó al borde de la semifinal. Italia presentó un gran partido en Múnich y superó a los Red Devils con un marcador de 2-1.
Se esperaba que Bélgica mostrara un juego más estratégico, especialmente con la presencia de Kevin de Bruyne, uno de los mediocampistas más talentosos a nivel mundial. Sin embargo, el rendimiento fue decepcionante y la defensa resultó ser un verdadero coladero.
Italia aprovechó cada oportunidad por las bandas, llegando a línea de fondo con facilidad, y era solo cuestión de tiempo para que se abriera el marcador. Los de Mancini avisaron pronto, al minuto 14, cuando Bonucci anotó tras una jugada a balón parado. La euforia italiana se vio frustrada brevemente cuando el VAR anuló el gol, haciendo que todos se sentaran de nuevo, ya que ese tanto no contaba.
Un poco después, Barella abriría el marcador para Italia, y al 44′, Lorenzo Insigne marcó un gol impresionante desde fuera del área, clavando el balón en el ángulo y colocando a Italia en una cómoda ventaja de 2-0.
Durante el segundo tiempo, la situación no cambió: Italia dominaba y Bélgica intentaba resistir. En los momentos más emocionantes del segundo tiempo, una falta dentro del área les otorgó un respiro, y Romelu Lukaku anotó desde el punto penal para acercar el marcador a 2-1. Lo cierto es que los belgas nunca pudieron siquiera soñar con la prórroga; ese partido estaba perdido desde el principio.
La semifinal ya está definida: Italia se enfrentará a España, un duelo que promete buen fútbol y que ofrece a Luis Enrique la oportunidad de vengar lo ocurrido en el Mundial del 94, donde Tassotti le rompió la nariz a causa de la derrota de España ante La Azurra.
