Foto: RL Hevia
Los habitantes de Pinar del Río enfrentan una situación crítica luego de acumular más de 120 horas sin suministro eléctrico, tras el apagón que comenzó el pasado martes 5 de noviembre, generando un ambiente de extrema incertidumbre entre sus residentes.
A excepción de algunos lugares, como las instalaciones de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S. A. (ETECSA) y el conocido Reparto Los Militares, el resto de la zona sigue en completa oscuridad, a pesar de que decenas de linieros trabajan incansablemente para restablecer el servicio.
Como antecedente, se encuentra el colapso total del sistema electroenergético nacional (SEN) ocurrido el 18 de octubre, seguido del paso del huracán Rafael, que agravó aún más la situación de la red eléctrica.
La crisis que atraviesa Pinar del Río no es un hecho aislado, sino el resultado de la crisis energética que afecta a Cuba desde hace meses y que, al parecer, no tiene una solución a corto plazo.
Factores como la falta de mantenimiento en las infraestructuras, el escaso combustible y una red eléctrica deteriorada han llevado a cortes en el suministro, lo que impacta enormemente en el acceso a servicios básicos como agua potable y la conservación de alimentos.
Mientras tanto, los residentes de Pinar del Río, a la espera del restablecimiento del suministro eléctrico en sus hogares, denuncian una distribución desigual de la energía, donde solo ciertas zonas privilegiadas han logrado contar con electricidad.