Foto: Cuba Noticias 360
Texto: Fede Gayardo
El anuncio del gobierno de EE.UU. sobre la suspensión de los permisos de viaje ha caído como un balde de agua fría para muchos cubanos que esperaban beneficiarse del programa de Parole Humanitario, informó Fox News citando a un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Esta decisión se tomó tras la revelación de un informe interno que mostró niveles significativos de fraude, lo que llevó a la suspensión “por precaución” de la emisión de autorizaciones de viaje anticipadas para el programa desde mediados de julio.
Además, el DHS indicó que procederá a realizar una revisión detallada de las solicitudes de los patrocinadores y destacó que “cuenta con mecanismos de revisión para detectar y prevenir el fraude y el abuso en nuestros procesos de inmigración”.
Es bien sabido que la implementación de este tipo de visas humanitarias por parte del gobierno de Joe Biden ha beneficiado a ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela.
Durante más de un año y medio, más de medio millón de personas de estas nacionalidades han logrado viajar a EE.UU., pero actualmente muchos podrían enfrentar el riesgo de perder este beneficio si se detecta algún tipo de fraude durante el proceso.
Las repercusiones en estos casos podrían ser varias. En primer lugar, se encuentra el procesamiento penal, ya que aquellos involucrados podrían ser llevados ante la corte de inmigración, donde se les podría revocar las visas y autorizaciones de viaje emitidas.
Por otro lado, los casos de fraude identificados por el DHS serán remitidos al Departamento de Justicia, donde los responsables podrían enfrentarse a cargos criminales, incluyendo multas, sanciones e incluso penas de cárcel.
Asimismo, corren peligro aquellos que hayan obtenido sus autorizaciones de viaje a través de fraude, ya que si se revocan sus visas, no solo perderán el derecho a permanecer en EE.UU., sino que también estarán sujetos a procedimientos de deportación.
Otro riesgo para quienes sean deportados por fraude será la posible prohibición de reingreso a EE.UU., la cual puede ser temporal o permanente, dependiendo de la gravedad del fraude y de las leyes aplicables.
Los casos de fraude identificados podrían afectar, además, sus futuras solicitudes de visados o migración a EE.UU., ya que el historial de fraude se registrará y se considerará en cualquier proceso migratorio futuro.
Finalmente, se advierte que los patrocinadores implicados en fraudes también enfrentarán consecuencias. Estos podrían ser investigados, procesados y enfrentar cargos criminales, así como perder la posibilidad de patrocinar a otros migrantes en el futuro.