Foto: RL Hevia
Texto: Fede Gayardo
Salvador Valdés Mesa, vicepresidente de Cuba, reconoció que ni una pensión ni un salario permiten «vivir» en la isla. Durante un recorrido por Pinar del Río, el funcionario cubano afirmó que el ingreso promedio de los cubanos resulta insuficiente para enfrentar los precios actuales en el país.
Teniendo en cuenta que la pensión mínima mensual es de 1 528 CUP y que el arroz importado cuesta 320 CUP por libra, un jubilado podría adquirir apenas unas 4,78 libras al mes.
Esta cantidad es insuficiente para satisfacer las necesidades alimentarias básicas, especialmente dado que el arroz es un alimento fundamental en la dieta cubana. La situación es similar con un salario medio de 5 000 o 6 000 CUP, que tampoco permite comprar los productos necesarios para una dieta promedio en la isla.
Durante su evaluación del programa arrocero en la mencionada provincia, Valdés Mesa propuso como solución “instar” a que la empresa estatal socialista aumente su eficiencia en el autoabastecimiento de arroz para el consumo interno, lo cual ayudaría a disminuir las importaciones.
Además, en su recorrido por las instalaciones de la Empresa Agroindustrial de Granos Los Palacios, la cuarta más importante del país, el vicepresidente subrayó la urgente necesidad de ampliar las áreas destinadas al cultivo de arroz y mejorar su rendimiento.
Afirmó que este cereal es un componente esencial de la dieta cubana, presente tanto en el almuerzo como en la cena, y destacó que el gasto en su importación impacta de manera significativa en la economía nacional.
Explicó también que la alta demanda de arroz obliga a la nación a invertir grandes sumas de divisas en su importación, lo que afecta negativamente la economía.
Ante este panorama, instó a “transformar cada palmo de tierra apto para el cultivo del cereal, con el fin de garantizar su accesibilidad para la población cubana”, según reportó el estatal Canal Caribe.
El mandatario admitió que la falta de divisas es un serio obstáculo para el desarrollo agrícola y enfatizó la necesidad de cambiar la cultura económica del país, pasando de ser importadores a exportadores. Señaló que, para generar divisas, es fundamental aumentar las exportaciones y diversificar la producción nacional.
El exdirigente de la Central de Trabajadores de Cuba explicó a los funcionarios locales que no se deben crear falsas expectativas entre la población y reconoció la complejidad del panorama económico, así como la necesidad de abordar los problemas de manera realista.
Actualmente, Cuba depende en gran medida de las importaciones de este grano, principalmente de países como Vietnam, mientras que su demanda interna se estima en aproximadamente 700 000 toneladas anuales.
Una de las iniciativas del gobierno para enfrentar esta crisis fue la entrega a una empresa vietnamita de más de 300 hectáreas de tierras, con la posibilidad de expandirse hasta 5 000, para que esta se encargue de todos los procesos.
En esta experiencia, calificada por los medios estatales como “la primera de su tipo en el país”, la explotación del terreno se realizará dentro de la Empresa Agroindustrial de Granos de Los Palacios, al sur de Pinar del Río.
La información, divulgada a principios de este año, aseguró que se desea concluir la siembra de 1 000 hectáreas de arroz en los primeros meses de 2025 como parte de un proyecto que, por el momento, tendrá un tiempo de “arrendamiento” de las tierras cubanas de tres años.