Fotos: Cuba Noticias 360
Texto: Hugo León
En un estadio Latinoamericano vibrante y con una afición dividida entre los industrialistas y una fuerte representación del oriente cubano, Santiago de Cuba dio un gran paso al derrotar a Industriales con un marcador de siete carreras a cuatro en el quinto juego de la semifinal de la 62 Serie Nacional de Béisbol.
Las avispas, aunque aún se encuentran por debajo en el marcador global, se adelantaron en el juego de hoy al anotar dos carreras en el primer tercio. Después de una breve reacción de los leones de la capital, lograron un impresionante racimo de cinco anotaciones que selló su victoria en el encuentro.
El rendimiento del abridor santiaguero Wilber Reyna fue sobresaliente, mostrando dominio desde la lomita. Reyna solo permitió dos carreras y seis hits en un total de siete entradas y un tercio, mientras que los lanzadores de la nave azul enfrentaron dificultades que les resultaron costosas.
A diferencia del juego del jueves, donde Industriales logró empatar y remontar, hoy los cambios de pitcheo de Santiago de Cuba fueron más acertados y lograron sofocar lo que parecía una contraofensiva de los leones. En la parte baja del octavo inning, un batazo de Torriente entre el jardín izquierdo y central permitió avanzar a un corredor hasta la tercera base.
Con bases llenas para los azules, Jaime Pelegrín fue al montículo por Santiago de Cuba, pero fue reemplazado rápidamente por Osvaldo Acuña. En una complicada situación, la jugada se cerró con un out a Yasmani Tomás en primera, lo que permitió que Calderón anotara y luego lo hiciera Torriente, reduciendo la ventaja a 7-4.
A pesar de esto, la esperanza de Industriales llegó a su fin.
Además del admirable trabajo de pitcheo de Reyna durante más de dos tercios del partido, con poco más de 80 lanzamientos, el line-up también funcionó a la perfección. Los bateadores apoyaron el esfuerzo de su lanzador, mientras que el descontrol de los pitchers de Industriales contribuyó a regalar bases por bolas que facilitaron las carreras contrarias en el segundo y tercer inning.
El quinto episodio fue crucial para Santiago. Un doblete de Silva permitió que Guibert avanzara hasta la tercera base y, con dos corredores en posición anotadora y sin outs, el cuerpo técnico azul decidió llenar las bases. La estrategia resultó efectiva y se sumaron dos carreras más. Posteriormente, un fly de sacrificio trajo la quinta carrera para el equipo santiaguero.
En el sexto inning, un sencillo de Guibert llevó a Martínez a la tercera base, y otro fly de sacrificio fue suficiente para anotar la sexta carrera. En la séptima entrada, cayó la séptima y última anotación de las avispas, lo que definió el destino del juego.
El clásico Industriales-Santiago, que ha despertado tanta pasión históricamente en el béisbol cubano, parece haber regresado. Ambos equipos se enfrentaran nuevamente en un sexto juego que se llevará a cabo en la tierra caliente.
Industriales permanece a un paso de la gran final de la Serie Nacional, a 13 años de su última corona en estas competencias, mientras que Santiago de Cuba disfrutará de la ventaja de jugar en casa, respaldados por una conga y una afición que no cesa de animar, tal como han demostrado en partidos anteriores.
Nada está decidido y habrá clásico para rato, algo que sin duda alegrará a los amantes del béisbol en Cuba.
