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El Ministerio Público de España ha formalizado la acusación contra Shakira, solicitando ocho años y dos meses de prisión, así como una multa de 23,8 millones de euros por seis delitos fiscales.
Dicha acusación se basa en la supuesta simulación de la cantante, quien habría pretendido no residir en España y utilizar un entramado de empresas situadas en paraísos fiscales para ocultar sus ingresos.
A pesar de que Shakira ya ha devuelto los 14,5 millones que exigía la Agencia Tributaria, además de otros tres millones en intereses, esto no evita que deba enfrentarse a la justicia debido a la querella presentada por la Fiscalía de Barcelona por seis delitos contra la Hacienda pública.
De acuerdo con la Fiscalía, la artista colombiana pasó un tiempo significativo en España, donde adquirió una vivienda con Gerard Piqué, contabilizando 242 días en 2012, 212 días en 2013 y 243 días en 2014.
El informe del organismo indica que la cantante se ausentó solamente para cumplir con compromisos profesionales y de ocio durante 124 días en 2012, 153 días en 2013 y 122 días en 2014.
“Estas ausencias, según lo estipulado en la Ley General Tributaria, deben considerarse esporádicas y calcularse para determinar los más de 183 días de permanencia en territorio español, necesarios para adquirir la condición de residente habitual y así ser considerado obligado tributario y residente fiscal”, añadió la Fiscalía.
Se alega que, con el fin de evadir impuestos, Shakira se valió de una red de empresas que había creado previamente, utilizando estas sociedades para que formalmente se registraran como titulares de los ingresos y del patrimonio.
Según el documento del organismo español, ella solo aparecía como última figura en algunas de estas sociedades ubicadas en paraísos fiscales como las Islas Vírgenes, Panamá, las Islas Caimán o Malta, donde la mayor parte de sus ingresos fue a parar de manera indirecta y de la que disfrutó en beneficio propio.
“Estas sociedades se establecieron con el único propósito de ocultar a la Hacienda Pública las rentas y el patrimonio de la acusada”, se afirma en el texto.
No obstante, a pesar de esta acusación y de que se pueda llegar a un pacto, la artista tendrá que presentarse en el banquillo de los acusados. Sin embargo, todavía existe la posibilidad de negociar con el Ministerio Público y el resto de las acusaciones hasta el mismo día del juicio, que en caso de llegar a un acuerdo se convertiría en un breve acto para ratificarlo.
En caso de que las negociaciones no prosperen, el caso de Shakira sería uno de los pocos juicios por fraude fiscal de grandes fortunas que finalizan sin una conformidad, similar a lo que ocurrió con Leo Messi en Barcelona, quien fue condenado a 21 meses de prisión por defraudar 4,1 millones a Hacienda.
