Fotos: Roy Leyra | CN360
Con la llegada de febrero, se acerca la fecha soñada para los enamorados, y muchos empiezan a prepararse días antes para elegir ese lugar especial que los acogerá durante lo que se conoce como «el día más romántico del año».
En La Habana, siempre tenemos varias opciones para escoger, a diferencia de otras provincias del país donde las alternativas son más limitadas. Algunos se deciden por los lugares de moda, mientras que otros buscan opciones más económicas. Si eres de los que opta por la segunda, queremos recordarte que lo barato no tiene por qué ser menos romántico, especialmente cuando hablamos de Cuba.
Los lugares para enamorarse en La Habana son abundantes, ya que el mismo encanto de la ciudad hace parte del trabajo. Para aquellos que anhelan un atardecer, una suave brisa, vistas impresionantes o una intimidad incomparable, hemos preparado esta selección.
No te dejes llevar por los estereotipos. Toma de la mano a tu pareja (o a quien podría serlo) y llévala a disfrutar de cualquiera de estos destinos en una escapada digna del 14 de febrero. Recuerda, es gratis y el encanto está garantizado, pero el resto de la conquista dependerá de ti.
Malecón de La Habana
El Malecón ha quedado grabado en la memoria de todos como una de las imágenes más románticas de la ciudad, con su típica pareja sentada en el muro. Imagina que podrías ser uno de esos dos este 14 de febrero.
Siéntate frente al mar, que siempre fascina, o camina un poco por sus 8 kilómetros de muro, el más icónico de la capital cubana. Las vistas, la brisa y las puestas de sol espectaculares están aseguradas en este rincón casi esencial para el amor en La Habana.
Parque Almendares
El Almendares es el parque más extenso de La Habana y es conocido como el pulmón de la ciudad gracias a su inmejorable ubicación junto al río del mismo nombre. Recorrer sus más de 700 hectáreas te permitirá desconectar del bullicio citadino y disfrutar de su sorprendente vegetación.
Este parque es perfecto para pasear en pareja, relajarse y disfrutar del entorno. Si te gusta la naturaleza, es el espacio ideal de La Habana, especialmente si tú y tu cita comparten ese interés.
Alameda de Paula
Un encantador lugar cerca del mar. Al final del Malecón y a pocos pasos del puerto y la terminal de cruceros, se encuentra esta pequeña alameda que seguramente te robará el corazón. Si deseas disfrutar del mar mientras contemplas la parte más antigua de La Habana, este es tu lugar.
Un amante de la ciudad no podría ignorarlo. Si decides pasear por el Malecón, este punto es el broche perfecto para culminar una velada romántica, especialmente si terminas en la incomparable Iglesia de Paula al caer el sol.
Cristo de La Habana
Algo más alejado del centro, pero igualmente imperdible, es el Cristo de La Habana. Si el monumento en sí es impresionante, las vistas que ofrece te dejarán asombrado. Aprovecha el viaje en la Lanchita de Casablanca y, en un instante, estarás en este mirador de la capital cubana.
Desde aquí se obtiene la mejor panorámica de la ciudad, y si llegas al atardecer, serás testigo de un ocaso extraordinario. Además, si tienes la suerte de encontrar el lugar poco concurrido, disfrutarás de un ambiente sumamente íntimo. Aprovecha para darle ese beso que tanto has anhelado con La Habana a tus pies.
El Morro
El Castillo de los Tres Reyes del Morro se ubica en una de las mejores localizaciones de la capital cubana. Custodiando la bahía, parece abrir las puertas a los navegantes que llegan a la isla, y desde sus diferentes puntos, puedes disfrutar de algunas de las vistas más privilegiadas de La Habana.
Te recomendamos asombrarte con el atardecer desde cualquiera de sus muros o perderte entre sus laberínticos y casi siempre solitarios espacios. Si la noche te sorprende y tu cita fue exitosa, no te pierdas el Cañonazo de las 9:00 p.m. para concluir tu impresionante velada.
Playita de 16
En el municipio de Playa, específicamente en Miramar, se encuentra la Playita de 16, un pequeño tramo de costa cubierto por diente de perro, pero es un lugar ideal para disfrutar de una tarde junto al mar sin alejarte demasiado de tu zona.
La «playa» en sí no es necesariamente la más hermosa, pero la vista al mar y el sonido de las olas rompiendo contra las piedras compensan. Aprovecha los bancos, siéntate con tu cita y, si suena algo de música romántica cerca, tendrás el escenario perfecto para hacer tu declaración y, quién sabe, quizás algo más.
Plaza Vieja
El casco antiguo de La Habana alberga la Plaza Vieja, un destino casi obligado para los turistas, pero eso no quita que sea un lugar muy romántico. Especialmente si decides sentarte junto a tu cita en su fuente central y olvidarte de los paseantes, disfrutando de la diversidad de sus construcciones, unas de las más eclécticas de la ciudad.
Así, entre el “art nouveau” y el modernismo, podrás disfrutar de una noche diferente, rodeado de visitantes y arquitectura, pero sin duda experimentando un romanticismo que pocos lugares pueden ofrecer en esta parte tan animada de la vieja Habana.