Foto: Captura de Video
Entre las actrices más versátiles de la televisión y el cine cubano destaca Silvia Águila. Esta talentosa intérprete, que comenzó su carrera desde muy joven en la televisión de la Isla caribeña, ha estado alejada de nuevos proyectos en la pantalla grande y pequeña. Sin embargo, el público cubano la recuerda con cariño desde sus primeros papeles.
Uno de sus últimos papeles memorables en el Séptimo Arte es el de una joven maestra en el filme «Conducta», dirigido por Ernesto Daranas en 2014. Tras esta magistral interpretación, que contrastó con la entrañable maestra Carmela, interpretada por Alina Rodríguez, poco se ha visto a Águila en producciones actorales.
En 2017, participó en el videoclip «Ángel y Habanera», una pieza musical de la cantautora Liuba María Hevia, dirigida por Pepe Hevia. En este audiovisual, la actriz compartió protagonismo con el popular actor Jorge Perugorría.
A principios de la segunda década del siglo XXI, Águila ya era reconocida como una actriz consagrada, habiendo realizado papeles destacados en cine y televisión cubana. Desde 1975, a la edad de 4 años, comenzó su carrera en televisión, interpretando diversos personajes en cuentos, teleteatros, series y novelas. Entre sus trabajos más sobresalientes se encuentran «Ramona», «La capitana del Caribe», «Papeles secretos», «Una cerca entre dos mundos», «Cumbres borrascosas» y más.
Gracias a su participación en series como «Los Papaloteros», «Pasión y Prejuicio», «Las huérfanas de la Obra Pía» y «Lo que me queda por vivir», ha logrado ganar una gran popularidad entre el público cubano. Con una trayectoria que se extiende por varias décadas, esta actriz ha demostrado su talento y versatilidad en la pantalla chica.
Su incursión en el cine también fue significativa. En 1996, debutó en la película «Amor Vertical», donde tuvo la oportunidad de compartir protagonismo con Jorge Perugorría bajo la dirección de Arturo Sotto. Esta primera experiencia en la gran pantalla consolidó su talento actoral y la estableció como una figura relevante en el cine cubano.
Once años después, en 2007, volvió a colaborar con Perugorría y Sotto en «La noche de los inocentes», donde reafirmó su habilidad para interpretar una variedad de roles y emociones.
Cada vez que alguien, ya sea una persona, una página dedicada a actores cubanos o sus mismos colegas, comparte una imagen de Silvia Águila, la admiración de su público no tiene límites. En tiempos recientes, la pregunta recurrente sobre su paradero, «¿dónde está?», se ha vuelto cada vez más común entre sus seguidores.
No obstante, más allá del interés legítimo por la vida personal y profesional actual de Águila, siempre quedará su vasta obra, la cual es un legado de un tiempo y una época en que la televisión y el cine cubano contaron con grandes estrellas.