Foto: RL Hevia
Los boxeadores Julio César La Cruz y David Morell defendieron el honor del boxeo cubano este fin de semana, después de que hace siete días Lázaro Álvarez y Robeisy Ramírez enfrentaran una dura derrota en la búsqueda de sus respectivas coronas mundiales.
El bicampeón olímpico de Camagüey, en representación de la Federación Cubana de Boxeo (FCB), se alzó con su primera corona profesional al superar al nigeriano Austine Nnamdi en un interesante evento celebrado en Conakry, la capital de Guinea, el pasado sábado.
Conocido como “La Sombra”, el boxeador cubano mostró un nivel indiscutible en la pelea estelar de la noche, programada a 10 asaltos, por el título de la división supercrucero de la Asociación Mundial de Boxeo (WBA, por sus siglas en inglés).
La Cruz realizó una estrategia perfecta, logrando dominar todas las rondas, según informó el sitio web Jit. Aumentó su control en la segunda mitad del combate, conectando con precisión, aunque los intercambios no fueron constantes, complementó la publicación.
Comentarios del cubano bicampeón olímpico Julio César La Cruz sobre su victoria en el título internacional de oro de la división supercrucero de la Asociación Mundial de #Boxeo, conseguido por decisión unánime en 10 asaltos ante el nigeriano Austine Nnamdi, en Conakry, Guinea. #Cuba pic.twitter.com/g4O3mtecfV
— JIT Deporte Cubano (@jit_digital) 17 de diciembre de 2023
Este éxito del también pentamonarca mundial es visto como el segundo y más relevante triunfo profesional de los Domadores de Cuba, después de que Lázaro Álvarez se coronara en la Federación Centroamericana y del Caribe de Boxeo a mediados de este año.
Precisamente, el pinareño, quien también compite bajo la FCB, fue uno de los dos cubanos que sufrieron derrotas el fin de semana anterior. “El Príncipe” se quedó cerca de conseguir su primer título universal de la WBA en el boxeo profesional, tras perder ante el ruso Albert Batyrgaziev en Dubái.
Ese mismo día otro campeón olímpico cubano también debió aceptar una derrota, se trata de Robeisy Ramírez, quien desde hace algunos años no tiene lazo con la federación cubana y compite por su cuenta en el circuito de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
El cienfueguero no pudo hacer honor a su apodo de “el Tren” ante el mexicano Rafael “El Divino” Espinoza, y perdió el título de la división peso pluma tras 12 asaltos que culminaron con decisión dividida por parte de los jueces.
En cuanto a Robeisy, su redentor fue Morrell, un boxeador que tampoco tiene relación con el boxeo cubano, quien mantuvo su estatus de campeón supermediano de la WBA. Este joven de solo 25 años finalizó su pelea contra el ghanés Sena Agbeko antes de que se completara el segundo asalto en el combate realizado el sábado en Mineápolis, Estados Unidos.
Actualmente, el boxeador nacido en Santa Clara ha logrado cinco defensas exitosas de su cinturón, todas por detención de los árbitros. Con este nuevo triunfo en las 168 libras, medios especializados como ESPN lo citan como un posible retador al destacado mexicano Saúl “Canelo” Álvarez, actual campeón en esa categoría.
DAVID MORRELL JR. DELIVERS 💥@OsvaryJ ends the final fight in Showtime Boxing’s 37-year history with a 2nd-round KO over Sena Agbeko.#MorrellAgbeko #ShowtimeBoxing pic.twitter.com/OqNzqScqg8
— SHOWTIME Boxing (@ShowtimeBoxing) 17 de diciembre de 2023