Foto: RRSS
Texto: Hugo León
Las autoridades cubanas reportaron el suicidio de un hombre en el céntrico boulevard de Sancti Spíritus, durante una operación policial que lo rodeaba.
Según los informes oficiales, el ciudadanos iba a ser arrestado por una supuesta agresión sexual, pero decidió lanzarse desde la azotea de un edificio en el centro de la ciudad.
El teniente coronel Arnel Ulloa Valdés explicó que el domingo pasado, una joven de 16 años presentó una denuncia contra el fallecido por un delito de agresión sexual.
Una vez que la policía tuvo conocimiento de la ubicación del sospechoso, los oficiales se dirigieron al lugar para proceder con su detención, pero la situación tomó un giro drástico.
“Recibimos información de que se encontraba en su domicilio ocultándose y fuimos a proceder a la detención. Al llegar al último piso, lo encontramos en la azotea. Desde el primer momento en que hicimos contacto con él, a más de 10 metros de distancia, estaba al borde de la azotea del edificio y tras varios intentos de hacerlo desistir de su objetivo, se lanzó al vacío”, relató Ulloa Valdés a la emisora Radio Sancti Spíritus.
“Por las lesiones sufridas, perdió la vida”, agregó el oficial.
De acuerdo con el oficial del Ministerio del Interior, momentos antes del suicidio, este ciudadano amenazó a la joven y a su niña a través de su teléfono celular. Además, enfatizó que las autoridades siempre intentaron proteger la vida de ambas.
“La detención se realizó con el objetivo, fundamentalmente, de salvaguardar la vida de la menor y de la ciudadana que había presentado la denuncia por presunta agresión sexual.”
En las redes sociales, varios usuarios destacaron la información proporcionada por las autoridades en relación a estos eventos, ya que no es habitual que se hagan públicos los casos de suicidio en la isla.
A pesar de que el tema no se discute con frecuencia, a lo largo de los años, Cuba ha sido uno de los países de la región con el mayor índice de suicidios. En 2022, por ejemplo, la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) reportó una tasa de 13 suicidios por cada 100 mil habitantes, casi el doble de la media de las Américas.