Foto: Century Club | Flickr
Los aficionados al béisbol en Cuba estarán de celebraciones este miércoles cuando el icónico Tony Oliva se suba al montículo del estadio Latinoamericano para lanzar la primera bola en el partido entre Industriales y Artemisa, correspondiente a una de las semifinales de la II Liga Élite del Béisbol Cubano.
El miembro del Salón de la Fama de Cooperstown recibió la invitación del presidente de la Federación Cubana de Béisbol, Juan Reinaldo Pérez Pardo, quien lo saludó recientemente a su llegada a la isla para visitar a su familia en su tierra natal, Pinar del Río, según la información proporcionada por Prensa Latina.
El exjardinero derecho y bateador designado de los Minnesota Twins había compartido hace dos años en una entrevista que su sueño sería lanzar la primera bola de un juego oficial en Cuba, un anhelo que podrá cumplir ahora a sus 85 años.
Oliva jugó 15 temporadas en las Grandes Ligas (MLB) entre 1962 y 1976, siempre con el uniforme de los Mellizos, cuyo actual estadio, el Target Field, tiene una estatua en su honor en una de sus entradas. Entre sus muchos logros en la Gran Carpa, destaca ser el primer bateador en conseguir el título de bateo en sus dos primeras temporadas (1964 y 1965) y obtuvo otro en 1971.
Además, el legendario número 6 de Minnesota fue el primer cubano en ser elegido Novato del Año, estableció un récord con ocho apariciones en Juegos de Estrellas y lideró en hits en cinco ocasiones, sumando otros importantes reconocimientos, incluidas las dos Series Mundiales que conquistó como entrenador en 1987 y 1991.
La presencia de Oliva esta tarde en el llamado Coloso del Cerro no será la primera de un exjugador de Grandes Ligas cubano en tales ceremonias, ya que en marzo de 2016, el exas del pitcheo Luis Tiant tuvo el honor de realizar el primer lanzamiento del histórico partido de exhibición entre la selección de Cuba y los Tampa Bay Rays.
