Foto: RL Hevia
La empresa Western Union (WU) ha anunciado el reinicio de su servicio de transferencias de dinero entre Estados Unidos y Cuba, tras los inconvenientes que se presentaron a comienzos de año.
En un comunicado conjunto con Orbit S.A, que en 2022 manejó remesas hacia Cuba desde Europa, Canadá y luego desde Estados Unidos, informaron que ahora los clientes de WU pueden enviar dinero desde cualquiera de sus puntos de venta en EE.UU., a través de la página web WesternUnion.com o mediante la aplicación móvil de Western.
No obstante, aclararon que los envíos están permitidos únicamente a personas naturales, excluyendo así a entidades jurídicas como las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas.
Los destinatarios deben poseer cuentas bancarias y tarjetas de débito en el Banco Popular de Ahorro, Banco Metropolitano S.A. y Banco de Crédito y Comercio (Bandec), además de que es posible enviar fondos a la tarjeta prepago de este último.
De acuerdo con la información proporcionada por Orbit S.A, el servicio se limita a transferencias a consumidores, permitiendo que los clientes en EE.UU. puedan enviar hasta 2.000 dólares USD por transacción, siempre que presenten un documento de identidad válido emitido por el Gobierno.
A pesar de las dificultades que se han experimentado en la recepción de las remesas, enfatizaron que “el dinero estará disponible para su recepción el mismo día (en cuestión de minutos tras realizar la operación), incluidos los fines de semana y festivos, gracias a recientes mejoras implementadas”.
También advirtieron que los clientes no tienen la opción de enviar fondos a sus propias cuentas bancarias o tarjetas de débito de Moneda Libremente Convertible (MLC) en Cuba, ya que estos depósitos son accesibles únicamente en dólares estadounidenses.
En marzo de este año, una declaración divulgada por la misma WU mencionaba que “estábamos enfrentando problemas con nuestros socios en Cuba”, después de que algunas instituciones bancarias de la isla reportaran “afectaciones en los servicios en sucursales y a través de canales electrónicos de pago”.
Para el gobierno cubano, las remesas representan una fuente crucial para una economía nacional que se enfrenta a dificultades crecientes, sobre todo aquellas que provienen de Estados Unidos, que alberga la mayor comunidad cubana fuera de la isla y cuya migración ha aumentado notablemente en los últimos años.