La COVID-19 ha dejado un impacto significativo. No solo transformó nuestras vidas de manera abrupta, sino que también llevó a que como sociedad adoptáramos una postura mucho más cautelosa ante cada nueva enfermedad que surja o resurgir.
Eso es precisamente lo que está ocurriendo con la Viruela del Mono, una enfermedad que aún no ha llegado a Cuba, pero se ha reportado en al menos 15 países. Este jueves se registraron casos en Europa y América del Norte.
Pero, ¿qué sabemos hasta ahora sobre esta enfermedad? ¿Podría poner en riesgo al mundo de nuevo como lo hizo el SARS-CoV-2? Cuba Noticias 360 te proporciona algunas claves para comprenderla.
La viruela es un virus que había sido erradicado hace décadas. Sin embargo, se están reportando casos de la viruela del mono, un virus que no es nuevo. Esta enfermedad fue identificada por primera vez en 1958 y suele provocar brotes periódicos en varios países africanos, siendo endémica en distintas regiones de ese continente, según explica el científico cubano Amilcar Pérez-Riverol en Twitter.
A pesar de ello, desde hace décadas no se había expandido a otras regiones del planeta, lo que añade un motivo de preocupación actual.
Existen dos variantes principales: la del Congo, con una letalidad del 10 por ciento, y la de África Occidental, con una letalidad del 1 por ciento. Los casos identificados en el brote actual en Europa y América del Norte son de la variante menos letal, precisó Pérez-Riverol.
«La velocidad de los brotes es inusual para este tipo de virus, pero esto no será otra COVID-19», aseguró el microbiólogo.
El diario El Mundo explica que la viruela del mono puede infectar ardillas, ratas, ratones, conejos, monos, perritos de las praderas y humanos.
El contagio puede ocurrir de las siguientes maneras:
- La persona puede contraer la viruela a través de la mordida de un animal infectado.
- A través de objetos contaminados, como ropa o sábanas.
- El contagio entre humanos puede ocurrir por heridas en la piel.
- A través de saliva o secreciones respiratorias.
- A través de heces.
Según la OMS, el periodo de incubación de la viruela del mono (el intervalo entre la infección y la aparición de los síntomas) se estima entre 6 y 16 días, aunque puede variar.
Los síntomas de la viruela del mono en humanos son similares a los de la viruela, aunque un poco más leves. Generalmente incluyen: fiebre, considerado el primer síntoma, dolor de cabeza, erupciones que comienzan en la cara y luego se extienden a otras partes del cuerpo, dolores musculares, dolor de espalda, escalofríos, agotamiento y ganglios linfáticos inflamados.
La Organización Mundial de la Salud indica que no existen tratamientos ni vacunas específicas contra la infección del virus de la viruela símica o del mono.
No obstante, los especialistas mencionan que la vacuna contra la viruela podría contribuir a la prevención, especialmente entre el cuarto y el catorce día tras el contagio. Sin embargo, también explican, de acuerdo con El Mundo, que al haberse erradicado la viruela, no quedan muchas reservas de esta vacuna, que no se utiliza desde 1980.
Por el momento, la OMS solo ha recomendado a los países rastrear los contactos de los casos que presenten la enfermedad, tal como se hizo con la COVID-19.