Foto: RL Hevia
Este sábado, el parque matancero “16 de abril” se vestirá de gala cuando el equipo local de Unión de Reyes enfrente a la selección de Trinidad en la gran final del renacido Torneo de Clubes Campeones del Béisbol Cubano.
A pesar de la calidad discreta del torneo, que reunió a los 16 campeones provinciales en series de eliminación directa, la afición beisbolera de la isla tiene grandes expectativas para el desenlace de un evento que volvió al calendario deportivo nacional después de 16 años de ausencia.
Esta nueva definición, que se juega al mejor de tres partidos, promete al menos una notable rivalidad, considerando los resultados anteriores de ambos equipos, que llegan a la disputa del título como campeones de la zona Occidental y Oriental, respectivamente.
Por un lado, la “locomotora unionense” cuenta con una ofensiva imponente que no ha dejado respirar a ninguno de sus rivales en las fases previas. Por el contrario, los “tiburones” trinitarios presentan un pitcheo excepcional, respaldado por dos lanzadores con excelentes resultados en la Serie Nacional.
Según un informe del periódico Jit, el poderío de los bates de Unión de Reyes se hizo evidente en las tres etapas anteriores. Los dirigidos por Saúl Vasallo lograron un impresionante promedio de .350, con un OBP de .465, dos jonrones y 53 carreras impulsadas en siete encuentros.
La situación no fue la misma para su rival espirituano, que alcanzó solo .277 de promedio, con un modesto OBP de .362, apenas un cuadrangular y 21 carreras impulsadas. Sin embargo, el equilibrio puede ser alcanzado en el montículo, ya que los brazos de Ariel Zerquera y Yankiel Duardo no tienen rival en el bullpen de los yumurinos.
Con el respaldo de esos dos ases, el pitcheo de Trinidad ha trabajado a un promedio de 1.67 carreras limpias en 42 entradas, con un extraordinario WIHP de 0.90, habiendo otorgado solo 17 boletos y permitiendo un promedio rival de .166.
De hecho, el abridor del primer juego de la final para los escualos será el zurdo Zerquera, quien ya lanzó un juego sin hits ni carreras en este torneo y tiene un récord de dos victorias sin derrotas, además de un magnífico PCL de 0.78.
En el lado opuesto, el elegido para el primer enfrentamiento es el derecho Andy Quesada, un lanzador con experiencia en cuatro Series Nacionales, aunque sus números no son deslumbrantes. Tiene un balance de 1-0, permitiendo 4.08 carreras limpias por juego y muestra un promedio de embasados de 1.75 por entrada.
Adicionalmente, el mánager de los matanceros confirmó que William Aguilera (3-0) tomará el relevo en el segundo juego, mientras que el trinitario Osmany Rodríguez eligió a Yoannis Hernández (1-0). Si cada equipo gana un partido el sábado, el tercer y decisivo choque se llevará a cabo el domingo.
Este torneo, que surgió en la década de los 90, tuvo su última edición en 2008, cuando Guantánamo se coronó campeón bajo la dirección de Epifanio Dominico, según la reseña de Jit. Este experimentado entrenador logró cuatro de los cinco títulos de ese municipio líder.