Foto: Crosby Group
Lo que se había anunciado como un gran espectáculo lleno de estrellas y goles… no decepcionó. El Paris Saint Germain y el Riyahd de Arabia Saudita pusieron todo su empeño y ofrecieron un show que, hasta el minuto 60, mantuvo entretenida a gran parte de la comunidad futbolística mundial.
El reencuentro en el terreno de juego entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo fue, sin duda, el ingrediente especial de este delicioso banquete, que incluyó lo mejor del once parisino y un equipo mixto de los dos clubes de la capital saudí, el Al Nassr y el Al Hilal.
Casi al inicio del encuentro, el genio argentino abrió el marcador al minuto tres, aprovechando un despiste en la defensa para activar desde el primer momento la competencia con su eterno rival portugués.
Por su parte, CR7, portando el brazalete de capitán, lideraba los esfuerzos para lograr el empate del Riyahd, y el esfuerzo tuvo su recompensa con un doblete en la primera mitad, que finalizó con un marcador de dos goles por bando.
La segunda mitad se presentaba prometedora y llena de emoción. Incluso Ronaldo, a quien se había anunciado que solo jugaría 45 minutos, volvió al campo para regalarnos un poco más de su último baile con Messi.
Sin embargo, ni uno ni otro acapararon todos los focos, ya que el protagonismo se trasladó al presente del fútbol mundial. Mbappé mostró su potencia y habilidad, poniendo en apuros en varias ocasiones a la defensa rival.
El delantero francés concluyó su actuación con dos asistencias y un gol de penal, tras un disparo de Messi que impactó en la mano de un defensor, algo que el árbitro no pasó por alto.
Con un 4-3 al minuto 60 y casi todas las estrellas satisfechas, comenzaron los cambios y las expectativas bajaron. El resto del encuentro, aunque ganó en verticalidad, se convirtió en un mero trámite, después de que Messi, Cristiano, Mbappé, Neymar y otros abandonaran el campo.
No obstante, las sustituciones no pusieron fin a la fiesta, y se dio tiempo para otro par de goles que dejaron el marcador final en un 5-4 a favor de los visitantes franceses.
Tras nueve goles y decenas de jugadas espectaculares en poco más de 90 minutos, el mundo volvió a darse cuenta de que, probablemente, este jueves 19 de enero de 2023, las dos grandes figuras del fútbol del siglo XXI se hayan enfrentado por última vez.
El destino quiso que, independientemente de victorias o derrotas, ligas y Champions, la cuenta goleadora entre ellos quedara igualada en 23 tantos, un guiño a una rivalidad que ha generado encendidos debates entre los aficionados de ambos lados.