Desde el comienzo de la invasión rusa en Ucrania, los medios de comunicación y las redes sociales se han dedicado a describir y analizar este conflicto que ya ha transcurrido más de 72 horas y ha cobrado la vida de más de 350 personas.
Una de las víctimas fatales de esta situación -como suele ocurrir en casi todos los conflictos bélico-políticos, especialmente en la era digital- es la verdad, con miles de videos y fotografías que circulan por internet, muchas veces distorsionando la realidad de lo que representan.
Algunas de las imágenes en la web 2.0 ilustran acciones militares de conflictos anteriores, mientras que otros videos han sido extraídos incluso de videojuegos.
Estas publicaciones engañosas a menudo provienen de fuentes “oficiales”. Un tweet publicado por la cuenta verificada del Ministerio de Defensa ucraniano mostraba imágenes de un combate aéreo, acompañadas por la leyenda: “El MiG-29 de la Fuerza Aérea de las Fuerzas Armadas destruye el Su-35 de los ocupantes rusos”.
Sin embargo, medios especializados en verificación de datos demostraron que estas imágenes pertenecían a secuencias del videojuego Digital Combat Simulator World.
A pesar de esto, el video ha sido compartido millones de veces en diversas plataformas sociales.
La organización International Fact-Checking Network (IFCN) advirtió el jueves sobre la existencia de más de 150 noticias falsas en menos de 24 horas. Al día siguiente, la cifra superó las 200.
Entre las imágenes utilizadas se incluyen “ataques aéreos en Gaza en 2021, misiles lanzados por Hamás contra Israel en 2021, una operación turca en el norte de Siria en 2020, una explosión en Beirut (Líbano) en 2020, un entrenamiento del ejército sirio en Alepo en 2019, un ataque a civiles bombardeados por un helicóptero militar en Turquía en 2016, una incursión de las Fuerzas Especiales estadounidenses en la Mezquita Dorada en Irak en 2004, o un ataque en Bagdad (Irak) en 2003”, según reporta el medio español El Periódico, citando el informe del IFCN.
Además, se informa que también circulan imágenes del impacto de un rayo en una central eléctrica, explosiones en un mercado de pirotecnia en México en 2016, una explosión controlada en Alemania en 2012, y un incendio en Chernóbil en 2020, presentándolas como si fueran parte de los bombardeos de la actual guerra.
Incluso, la propia justificación presentada por Vladimir Putin para atacar Ucrania se refiere a un supuesto “genocidio” en el Donbás, el cual no ha podido ser corroborado de manera fehaciente.
Frente a este panorama, se recomienda pensar dos veces antes de compartir cualquier contenido relacionado con este tema y, de ser posible, realizar una búsqueda inversa de imágenes en Google para detectar su origen.
Aunque no es un método infalible, podría ser una manera efectiva de limitar la propagación de desinformación.