Texto: Alejandro Varela
Se dice que donde hay desquite no hay agravio y bajo esa premisa, este miércoles se presentó la cubana Yaimé Pérez en el bosque de la Cambre, en Bruselas. En un escenario atlético inédito, recreado en los llamados pulmones de la capital belga, se llevaron a cabo las competencias de disco tanto en masculino como en femenino, como antesala del reconocido Memorial van Damm, que se disputará el próximo viernes.
La campeona mundial de Doha 2019 ganó una peculiar competencia de la Liga del Diamante al lanzar el implemento hasta los 63,41 metros en la ronda final, superando por solo tres centímetros la marca de la campeona olímpica estadounidense Valarie Allman, quien la relegó al bronce en Tokio 2020.
Ese lanzamiento le permitió a la santiaguera también tomar desquite de otra histórica rival, la croata Sandra Perkovic, quien la había vencido recientemente en París hace tres días, pero que esta vez quedó relegada al tercer lugar tras marcar foul en su último intento.
Yaimé también registró el mejor envío de la competencia con 66,47 metros en su segundo intento, y tuvo una de sus mejores actuaciones generales en la actual temporada, donde no ha logrado superar los 69 metros, marcas que le valieron su cetro mundial hace un par de años.
Sin embargo, ahora suma su segunda victoria en el certamen diamantino, tras el triunfo en la parada inaugural de Doha, en mayo pasado, y se consolida como una de las favoritas para llevarse la codiciada piedra preciosa en la prueba final prevista en Zúrich los días 8 y 9 de este mes.
Un panorama diferente enfrenta su compatriota Denia Caballero, quien se encuentra inmersa en un calendario mediocre, lejos de los puestos de vanguardia en cada competencia que ha disputado este año. En Bruselas, su mejor resultado fue de 62,28 metros, lo que solo le alcanzó para el cuarto lugar.
La villaclareña, campeona mundial en Beijing 2015, no logró clasificar a la final de esta disciplina en los recientes Juegos Olímpicos de Tokio, mientras que Pérez también quedó por debajo de las expectativas al solo alcanzar la medalla de bronce, cuando muchos expertos la consideraban una de las posibles ganadoras de oro para Cuba en la cita estival.
A pesar de ello, ambas atletas se destacan como las más estables y con los mejores resultados en los últimos cinco años para el atletismo cubano, un deporte que tiene al saltador de longitud Juan Miguel Echevarría como su otro gran exponente en la escena mundial.