Imágenes: Periodismo del Motor
La catedral de Santa Sofía se destaca como uno de los monumentos arquitectónicos más importantes de la antigua Rus de Kiev y es el primer sitio ucraniano que fue incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Sin embargo, la conocida marca Red Bull eligió las inmediaciones de este emblemático lugar como escenario para uno de sus anuncios promocionales, y el resultado no fue el esperado en cuanto a la imagen de la marca.
Según El Confidencial, la filmación del anuncio en la plaza de la Catedral dejó marcas de neumáticos en más de 2.000 metros cuadrados de pavimento de adoquines amarillos. El teniente de alcalde de la ciudad, Kostiantyn Usov, indicó en su perfil oficial de Facebook que Red Bull realizó el rodaje sin autorización el 10 de agosto por la mañana, utilizando dos coches de ‘drift’. A pesar de que las autoridades habían expresado su negativa a permitir el rodaje en esta localización, que consideran un lugar que necesitan proteger y conservar, “la empresa lo hizo de todas formas”, agregó Usov.
Red Bull llevó a cabo la grabación a primera hora de la mañana, en secreto y sin las debidas medidas de seguridad para resguardar a los peatones, lo que supuso un riesgo para las decenas de personas que necesitaban cruzar la plaza para llegar a sus trabajos, esquivando los vehículos. Los resultados pudieron haber sido trágicos. Este acto no solo es considerado vandalismo intolerable, sino también un comportamiento irrespetuoso, sentenció un miembro del gobierno local.
“Es un lugar sagrado, el sitio donde nació el estado ucraniano”, dijo Nelia Kukovalska, directora general de la Reserva Nacional de Conservación de Santa Sofía en Kiev, sobre esta plaza, que está cerca del Patrimonio de la Humanidad. La prensa local ha calificado el acto, al menos, como negligente. Por su parte, el Ministerio de Cultura y Política de Información de Ucrania ha instado a castigar a los organizadores y participantes tras una investigación exhaustiva, indicando que las pérdidas causadas son irreversibles. Hasta el momento, no se ha compartido el costo exacto de la reparación, pero se estima que superará los 50.000 grivnas.
¿Cuál era el contenido de ese comercial que llevó a Red Bull a asumir tales riesgos? El material estaba destinado a conmemorar el Día de la Independencia de Ucrania, que se celebra cada 24 de agosto, y contaba con la participación del piloto de ‘drift’ Conor Shanahan, varios influenciadores del país y la rapera ucraniana Alyona Alyona.
Alyona lanzó su álbum debut en 2019 y sus videos en YouTube tienen millones de visualizaciones. La prensa especializada la ha calificado como una artista original, en contra de los estereotipos. Horas después de la grabación con Red Bull, fue vista limpiando el pavimento.
Es importante recordar que la reconocida bebida energética ha construido su comunicación de marca a través del mundo deportivo. Los conceptos de aventura y riesgo asociados a Red Bull han llevado a la compañía a patrocinar innumerables eventos deportivos y atletas, en su mayoría vinculados a deportes extremos.
Se podría pensar, entonces, que la marca cuenta con un equipo de mercadotecnia que comprende el ámbito deportivo, lo que plantea la pregunta: ¿sabían que causarían estas marcas en un área patrimonial? Para responder de la manera más precisa, es necesario entender qué son los coches de drift y el daño que su uso puede provocar.
Este complicado estilo de conducción implica derrapar al forzar al vehículo a seguir una curva con inercia para que se desplace lateralmente el mayor tiempo posible. Las marcas en el pavimento son resultado de los giros del vehículo, y aunque existen diferentes tipos de neumáticos y modos de tracción (la trasera es la más común, mientras que la integral y la delantera son menos frecuentes), esta técnica peculiar deja un deslizamiento visible en las pistas destinadas a este tipo de maniobras, que deberían llevarse a cabo en espacios abiertos de cemento liso, moqueta o asfalto.
La empresa austriaca Red Bull ha estado envuelta en otros litigios y escándalos, principalmente relacionados con publicidad engañosa. Tal vez uno de los más destacados fue el de 2014, cuando enfrentó una demanda en Estados Unidos por 13 millones de dólares, asociada a su eslogan “Red Bull te da alas”. Aunque pudiera parecer un slogan divertido, resultó en una situación poco placentera para la compañía, que se vio obligada a indemnizar a aquellos consumidores que pensaron que realmente les proporcionaría alas.
Lo cierto es que la reputación de la compañía austríaca ha sido gravemente dañada por los recientes incidentes, a pesar de que han eliminado de sus redes sociales las publicaciones que hacían alusión a la grabación. La situación ha alcanzado tal importancia que los involucrados podrían enfrentar hasta 4 años de prisión, según reporta El Confidencial. Por el momento, ya hay una investigación en curso y los vehículos utilizados para la filmación, que llevaban los colores de la marca, han sido confiscados.