Mientras más de una treintena de cubanos se espera que regresen a la grama de las Grandes Ligas en 2021, la Major League Baseball y el Sindicato de Jugadores han acordado mantener las dobles carteleras de siete entradas y los corredores en la segunda base para comenzar los extrainnings, por segundo año consecutivo.
El acuerdo no incluye el uso del bateador designado en la Liga Nacional ni una expansión del formato de playoffs, algo que se probó de manera experimental el año pasado, según lo informado por Associated Press.
Después de permitir la participación de 16 equipos en la postemporada en vez de 10, MLB propuso que este año 14 equipos participaran en los playoffs, aunque retiró ese plan el mes pasado.
Un total de 78 juegos se definieron en entradas adicionales el pasado año. Los de mayor duración fueron dos partidos de 13 entradas en Houston, donde los Dodgers de Los Ángeles y Oakland lograron la victoria el 29 de julio y el 7 de agosto, respectivamente. Cada temporada previa desde 1901 había registrado al menos un juego de 15 entradas o más. Cuarenta y cinco juegos fueron pospuestos debido a la pandemia, y dos de estos no pudieron ser reprogramados. Para completar una temporada abreviada, se llevaron a cabo 56 dobles carteleras, la mayor cantidad desde las 76 en 1986.
El acuerdo incluye un proceso más avanzado de rastreo de contactos relacionado con COVID-19, que implica el uso de tecnología, así como reglas adicionales para asegurar el cumplimiento de los protocolos sanitarios. Los entrenamientos de primavera comenzarán el 17 de febrero y la temporada regular iniciará el 1 de abril. Los jugadores, el personal de campo y cualquier otra persona que requiera acceso a ellos en los estadios deberán usar pulseras de rastreo electrónico desde el comienzo de los entrenamientos de primavera y enfrentarán sanciones por violaciones. Se incentivará a los jugadores a vacunarse, aunque no será obligatorio.
MLB y la asociación de jugadores se unieron para gastar alrededor de $35 millones de dólares en pruebas y regulaciones de COVID-19 el año pasado.
Los jugadores se someterán a pruebas de PCR por segunda temporada consecutiva, principalmente a través de muestras de saliva, aunque se permitirá el uso de hisopos nasales. Ocasionalmente se tomarán muestras de sangre para realizar pruebas serológicas o rápidas de anticuerpos. Las pruebas de PCR se llevarán a cabo al menos cada dos días desde el inicio de los entrenamientos de primavera y continuarán mientras el jugador esté activo hasta el final de la postemporada. Además, se realizará una evaluación diaria de la temperatura y los síntomas.
Los entrenamientos de primavera comienzan el 17 de febrero en Florida y Arizona. Un jugador deberá cumplir con una cuarentena en casa de cinco días antes de reportarse, con excepciones para actividades esenciales y entrenamientos o ejercicios al aire libre aprobados. Durante el entrenamiento de primavera, la temporada y la postemporada, los jugadores, el personal de campo, y el personal que no juega que tenga acceso a ellos, no podrán ir a restaurantes, bares, gimnasios, casinos o participar en reuniones internas de 10 o más personas. Se alentará a los grupos que viajan a mantener abiertas las ventanas de las habitaciones de hotel y los autobuses del equipo para una mejor ventilación, de acuerdo con el documento de más de 100 páginas revisado por AP.
Durante la temporada regular, un juego que se detenga por lluvia antes de alcanzar las cinco entradas será suspendido y continuado en otro momento. Los jugadores podrán conducir sus propios vehículos en lugar de usar los autobuses del equipo para maximizar el distanciamiento social.