Foto: David Huamani Bedoya / Shutterstock
Texto: Hugo León
Un operativo antidrogas realizado por la policía habanera y el Ministerio del Interior (Minint) en las cercanías del parque El Curita, en Centro Habana, concluyó con varios vendedores y más de una docena de consumidores arrestados, según informaron medios no estatales cubanos.
Este lugar es conocido como punto de salida de taxis hacia diferentes partes de la ciudad y, presuntamente, se ha convertido en un punto de encuentro para drogadictos y vendedores de estupefacientes, especialmente durante la noche.
El operativo tuvo lugar desde al menos el sábado hasta la madrugada del martes, resultando en la detención de decenas de jóvenes consumidores de “el químico”, una sustancia altamente adictiva basada en un cannabinoide sintético que ha ganado popularidad en La Habana en los últimos meses.
Además, fueron arrestados varios vendedores de este peligroso producto, informó el medio no estatal Diario de Cuba.
Las dosis de “químico” que se comercializan en El Curita cuestan alrededor de 200 pesos, siendo uno de los más económicos disponibles para los consumidores de drogas en La Habana. En comparación, la llamada “piedra” se vende entre 900 y mil pesos, y la marihuana puede costar mil 200 o más.
El operativo inicial, el 19 de febrero, identificó a un joven de 22 años llamado Maykel Herrera como uno de los distribuidores de la zona, y tras esto, otros jóvenes fueron detenidos por las autoridades en las madrugadas siguientes.
Por otro lado, la prensa estatal informó en días anteriores sobre la acusación de 15 personas implicadas en un caso de narcotráfico internacional, para quienes se solicitaron penas de entre 20 y 30 años de privación de libertad. A estos individuos se les incautaron unas 300 libras de marihuana, un arma de fuego y una matrícula falsa utilizada en un auto de turismo, entre otros bienes.
Aunque las drogas más consumidas en la isla son el tabaco y el alcohol, en los últimos años el uso de estupefacientes y sustancias afines ha llamado la atención de las autoridades, debido al aumento de consumidores y la temprana edad de inicio en esta práctica, que según Salud Pública ronda los 15 años.