Desde siempre, los rasgos de personalidad que han estado relacionados con un carácter fuerte y de autocontrol se han asociado con personas confiables. Sin embargo, eso puede estar por cambiar, gracias a diversos estudios y experimentos.
En uno de ellos, realizado en París, se llegó a la conclusión que personas con autocontrol están más dispuestas a hacer sufrir a otros. A continuación, traemos los detalles de este experimento.
El experimento que cambia la forma de ver el autocontrol
En el interesante estudio participaron personas con diferentes rasgos de personalidad: impulsivas, con autocontrol y carácter medio. En este, se les engañó a los participantes haciéndoles creer que estaban participando en el piloto de un programa de juegos nuevos.
Para el supuesto programa llamado La Zone Xtreme, los participantes se dividirían en parejas, uno haría el papel de “interrogador” y el otro de “concursante”. Hasta aquí, va todo bien, sin embargo, el juego se pondría macabro.
A las personas se les explicó que cada vez que el interrogado diera una respuesta incorrecta, el interrogador le daría una descarga eléctrica.
Dicha descarga iría aumentando en intensidad con cada respuesta errada, llegando incluso a los 460 voltios. La dupla que pasara 27 rondas ganaría el programa.
Al ser un programa de prueba, nadie ganaría dinero. Ataron al concursante a una silla en un cuarto oscuro y el interrogador se quedó en el escenario, así comenzó el juego.
Con cada equivocación se escuchaban los gritos de dolor del concursante (gritos fingidos, los concursantes eran parte del experimento) aun así la gran mayoría de interrogadores seguían electrocutando a su “compañero”.
Lo que encontraron los científicos sorprendió a todos: las personas con autocontrol y disciplinadas fueron las más dispuestas a administrar descargas eléctricas más altas.
Lejos de lo que los investigadores pensaban antes del estudio, que “los más crueles” serían aquellos con rasgos de personalidad impulsiva o antisocial.
¿Por qué los individuos más disciplinados demostraron ser más crueles?
Aunque haya sorprendido que las personas con mayor autocontrol y disciplinadas fueron las más dispuestas a administrar descargas más fuertes, hay una explicación.
Si bien este tipo de carácter se asocia con personas con alta moralidad y apegados a las normas, esa misma puede ser la razón de su indolencia.
“A las personas que están acostumbradas a ser organizadas y cumplidoras, con una buena integración social, les resulta más difícil desobedecer”
Esas fueron las palabras de Laurent Bègue, un estudioso del comportamiento de la Universidad de Grenoble-Alpes que estuvo a cargo de analizar cómo se comportaron los individuos en este estudio.
En este caso en específico, ese perfil de personalidad significó que personas con autocontrol y carácter fuerte están más dispuestas a torturar a otra persona.
Este es solo uno de varios estudios que revelan rasgos de personalidad oscuros sorprendentes en individuos con alto autocontrol.
Esto puede ayudarnos a entender la razón por la cual muchas veces ciudadanos ejemplares pueden volverse tóxicos. E incluso comenzar a mostrar comportamientos poco éticos en los lugares de empleo y en otras facetas.
El autocontrol para superar impulsos
Por mucho tiempo el autocontrol se vio como un rasgo ventajoso y positivo. De hecho, las personas que lo poseen desarrollan un carácter fuerte y son propensas a ser más exitosas en la escuela y el trabajo. Suelen superar los impulsos de ser agresivos o de tomar drogas o alcohol en exceso.
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Por esos motivos se creía que el autocontrol ayudaba a fortalecer el carácter de una persona. Pero en otro estudio realizado en de la Universidad Bar-Ilan de Israel se analizó qué tan importante era este para que el individuo determinara las consecuencias de sus actos.
En este estudio se llegó a la conclusión de que el autocontrol es una herramienta para conseguir objetivos, pero estos pueden ser buenos o malos. Es así como las personas disciplinadas siguen sin problema la línea y las normas impuestas por la sociedad.
Pero si estas normas o lo que se espera que hagan cambia, lo harán felizmente sin tener en cuenta si otros salen perjudicados. Además, los individuos con alto autocontrol parecieron ser más cuidadosos al cometer un acto antisocial, evitando ser atrapados.
¿Personas autocontroladas son más crueles?
En otro estudio muy oscuro, el psicólogo Thomas Denson, de la Universidad de Nueva Gales del Sur, fue más allá.
Este invitó a los participantes a realizar una labor inusual: introducir insectos en un molinillo para exterminarlos. (Los insectos estaban seguros y no sufrían, pero los participantes no lo sabían)
Nuevamente aquellas personas que lo hicieron sin dudar fueron las que eran vistas como personas con carácter fuerte y autocontrol alto. Demostrando así que, si las normas lo permiten, tener una fuerte fuerza de voluntad puede llevar también a cometer actos de crueldad.
Las personas que “aplastaron” una mayor cantidad de insectos fueron esas con autocontrol alto. Estuvieron más dispuestos a cumplir lo que se les pidió y fueron “asesinos más eficaces” que el resto de los participantes.
Son varios los estudios que han ligado el autocontrol a rasgos oscuros y macabros de la personalidad. Por eso, antes de elegir pareja o amigos, vale la pena mirar con atención y darle una oportunidad a personas impulsivas e incluso un poco disciplinadas.
Lo cierto es que las personas con autocontrol ya no son tan fiables como se pensaba.
