Los nacidos bajo el signo de Capricornio son notoriamente grandes diplomáticos. Saben ser responsables, pero también materialistas y, a menudo, pesimistas. Suelen ser un poco ansiosos por llegar a la cima social y gracias a su infinita paciencia, también saben cómo cultivar relaciones con las personas adecuadas que les ayudarán a conseguir sus objetivos.

Durante su juventud, tienden a perder tiempo y dinero, pero una vez que son mayores, la seguridad y una cuenta bancaria se vuelven inmensamente importantes para ellos. Nunca tienen prisa, no son impulsivos y creen en los buenos modales, lo que les ayudan a alcanzar una posición de poder.

Un Capricornio siempre quiere creer en un poder superior, porque una vez que ha alcanzado una meta, si no hay otra meta a la que recurrir, necesita introspección. Los nativos de la casa de capricornio pueden ser susceptibles al reumatismo y la artritis. La constitución física generalmente se vuelve más fuerte a medida que envejecen.

Capricornio es un signo que tiende al celibato porque es demasiado reservado y egoísta para una vida matrimonial. Incluso fuera del matrimonio, será llevado a una vida de pareja destinada a la posesión, por lo tanto, no podrá dar ternura ni calidez. Entre la gente, tiende a exhibir, a modo de tarjeta de presentación, su riqueza (real o presunta) convencido de que esta tarjeta de presentación puede ayudarlo frente a las personas que más tiene a la vista y a las que aspira alcanzar. La ambición por alcanzar alturas sociales está siempre presente en este signo y obedece a dos fuertes imperativos: el orgullo y la sed de poder. La mujer Capricornio es parecida al hombre, hay dos tipos: los que permanecen frías ante el rostro del amor aunque necesitan mucha dulzura,  y las que saben ser profundamente sensuales y realmente desinhibidas, aunque estas últimas son casos aislados.

Hay mujeres que tienden a un comportamiento calculador e inmoral: lo importante es que la pareja sea rica y generosa mientras ellas, como se mencionó, apenas dan y no solo emocionalmente. No dudarán en dejar a su pareja si conocen a una más rica.